Los coronabonos
Los coronabonos, en contra de lo que algunos sostienen con argumentos pseudoracistas, no son inapropiados sino una herramienta para paliar esta tragedia y ayudar a ciudadanos y empresas a salir de una catástrofe natural que no es culpa de nadie.
Al ser una prima de riesgo compartida, serviría para evitar los ataques de buitres especuladores a las primas particulares de cada país, como ya ocurrió en 2008.
Sería un instrumento óptimo para mutualizar la contingencia en tan funestos momentos y que, al acelerar la recuperación, daría sus frutos económicos.
Pero no. Dejando brotar la esencia de la derecha, que fiel a sí misma es insolidaria, egoísta e individualista, los gobiernos conservadores de Alemania, Austria, Finlandia y Holanda (casi paraíso fiscal), se opusieron. Solo se logró un acuerdo insuficiente in extremis, mostrando una vez más no estar a la altura. ¡Con la que se le viene encima a toda Europa!
El sur –Francia, Italia, España, Portugal y Grecia– aporta un 43 % del PIB europeo y si decidieran abandonar la UE muchos países del norte se debilitarían.
Indiscutiblemente, nos merecemos otra Europa.