El regreso de los lugares de culto: rezar con aforo limitado
Los fieles podrán ir a los templos y centros de culto durante la primera fase de la desescalada, prevista a mediados de mayo, aunque se deberá limitar el aforo a un 30% durante este periodo. Más adelante, en la segunda fase, prevista a finales de mayo, se ampliará el aforo al 50% del total de estos espacios.
Las instituciones religiosas permanecen atentas a las recomendaciones que les hagan llegar las autoridades. De hecho, la Conferencia Episcopal Española (CEE) anunció ayer que dará «previsiblemente» unas «sugerencias» a los obispos ante el plan de desescalada presentado por el
Gobierno, del mismo modo que hizo cuando se decretó el estado de alarma. Precisamente, ayer mismo se reunieron los obispos miembros de la comisión ejecutiva de la CEE. Las sugerencias que se den desde la Conferencia servirán a los obispos para ofrecer a los fieles de sus diócesis sus propias indicaciones ante la desescalada. De hecho, el cardenal arzobispo de Madrid, Carlos Osoro, ya anunció en su carta semanal publicada ayer que «pronto» dará una «normativa» para el regreso a las iglesias.
El decreto no estableció el cierre de los lugares de culto, sino que limitaba la asistencia, condicionándola a las medidas organizativas que se tomaran, como garantizar que se cumplía la distancia de seguridad de al menos un metro. Muchas iglesias han permanecido abiertas «como signo de esperanza», según dijeron los obispos, aunque en la mayoría no se han celebrado misas con público, sino que se han retransmitido por Internet. Los obispos dispensaron a los fieles de ir a misa el domingo.