Aragón pide a Francia reabrir el túnel de Bielsa el día 12
El consejero Soro reclama que se levante el cierre decretado el pasado 14 de abril Actualmente, la comunidad solo está conectada con el país vecino por el Somport
El consejero de Vertebración del Territorio, Movilidad y Vivienda del Gobierno de Aragón y presidente del Consorcio del Túnel de Bielsa-Aragnouet, José Luis Soro, ha solicitado al Prefecto de Altos Pirineos (Francia) que reabra este paso transfronterizo desde el próximo 12 de mayo. Soro reclama que se levante el decreto prefectoral que supuso el cierre temporal del túnel de BielsaAragnouet desde el pasado 14 de abril sin establecer una fecha de reapertura.
«Entendemos que la extensión del estado de confinamiento en Francia hasta el 11 de mayo de 2020 puede marcar una frontera temporal para el cierre actual», subrayó Soro, quien hace hincapié en que la reapertura de este túnel «es importante porque en estos momentos Aragón se encuentra conectada con Francia únicamente por la carretera del túnel de Somport».
Para el Gobierno de Aragón, la distancia entre el túnel de Somport y el de Bielsa-Aragnouet resulta suficientemente relevante como para prever al menos estos dos pasos transfronterizos abiertos a corto plazo.
A juicio del consejero de Vertebración del Territorio, «debería reanudarse la actividad económica a ambos lados de los Pirineos, comenzando por el transporte de mercancías, principalmente de origen agroalimentario, que habitualmente pasa por el túnel de Bielsa-Aragnouet».
El túnel se gestiona desde un consorcio en el que participan el Gobierno de Aragón y el Departamento de Altos Pirineos y su cierre tiene un impacto directo en los trabajadores transfronterizos de la Comarca de Sobrarbe (Aragón) y los valles de Nestes y Louron (Francia), y en particular en el personal vinculado a la gestión del túnel y sus carreteras de acceso.
Cuando se decretó el cierre, el túnel se encontraba en el momento de más tráfico pesado en este paso pirenaico, ya que la media de unos 60 camiones diarios del mes de febrero había aumentado hasta casi un centenar, algo que la DGA achacó a un cambio de hábitos por parte de los conductore de camiones. En el caso de los vehículos ligeros –esto es, en los coches particulares– la tendencia, sin embargo, había sido la contraria y se había pasado de unos 700 diarios a solo 30 por jornada.
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