Desahogo masivo
Miles de personas toman la calle el primer día de alivio del confinamiento
El Ayuntamiento de Zaragoza repartió 50.000 mascarillas y reforzó los trabajos de desinfección
Han tenido que pasar 48 días de confinamiento, –¡casi nada!– pero por fin ayer se pudo volver a pasear por la calles, correr, ir en bici o simplemente airearse. Había muchas ganas de salir de casa aunque fuese con horarios para recuperar cierta sensación de normalidad, que fue difícil sentir porque la mayoría caminaba con mascarilla y zigzagueaba para evitar acercarse o tocar al de al lado.
Eran tantas las ganas que fue complicado evitar ciertas aglomeraciones, sobre todo a primera hora del día en zonas puntuales de Zaragoza, como la ribera del Ebro o la Expo. Desde primera hora del día la gente se lanzó a pasear y practicar deporte y el volumen era tal que fue difícil cumplir con la distancia mínima de seguridad que recomiendan las autoridades sanitarias. Y eso que el ayuntamiento zaragozano ha cerrado al tráfico 14 calles de la margen derecha desde las 10.00 hasta las 20.00 horas para ofrecer más espacios por los que pasear y evitar concentraciones. El problema fue que, precisamente, el gentío se produjo antes y después de ese intervalo. También se reforzaron las labores de desinfección durante toda la jornada en vías y parques, sobre todo en los espacios con bancos donde más de uno se sentaba a tomar el sol o a descansar.
Los principales problemas se registraron hasta las 10.00 de la mañana, cuando runners, ciclistas, patinadores, paseantes y carritos de la compra compartieron turno y calles. Una situación que volvió a repetirse por la tarde, a partir de las 20.00 horas, aunque de una manera más calmada. Sucedió, en definitiva, lo mismo que hace una semana cuando los niños pudieron salir después de días de encierro en casa con un mayor. Entonces la novedad provocó concentraciones y alguna que otra infracción, ya que las reuniones en la vía pública siguen prohibidas y no se pude estar en grupo. Aún así, ayer se formó más de un corrillo entre vecinos y amigos.
CONTROL Y CONSEJOS La Policía / Local recorrió las calles tratando de disuadir a aquellos preparados para sortear la regla, informar de los horarios y repartir mascarillas. El consistorio tenía preparadas 100.000 para este fin de semana, y ayer se entregaron la mitad través de los agentes y de varios locales de alimentación.
En los barrios rurales, salvo en Casetas y Garrapinillos, sus vecinos tuvieron vía libre durante todo el día al tratarse de poblaciones con menos de 5.000 habitantes, por lo que disfrutaron del privilegio que, está vez sí, tiene mundo rural, donde no hay turnos ni limitaciones, salvo el sentido común.
En los poblaciones que superan este censo las franjas horarias más tranquilas fueron de 10.00 a 12.00 horas y de 19.00 a 20.00 horas, las reservadas para mayores y dependientes, los más vulnerables y de mayor riesgos. Durante estas tres horas el número de paseantes disminuyó de forma considerable, la distancia en
Los mayores se lanzaron a la calle con un especial cuidado para no cruzarse con más personas
El consistorio volverá a cerrar al tráfico 14 calles principales de la margen derecha
tre ellos se respetó y había un ambientes de tranquilidad que no se había sentido a primera hora del día, donde parecía que Zaragoza estaba en fiestas. El silencio marcaba la diferencia entre aquellos que se sentaron a disfrutar del sol, entre los que caminaban calle arriba y calle abajo ayudados por sus bastones y entre los que presumían de paso ligero.
SIETE HORAS / Una calma que, claro está, se rompió cuando sonaron las campanas de las 12.00. Las risas, los gritos, el ruido de las ruedas de los carritos y de los patinetes o del timbre de las bicis se adueño de la capital aragonesa. Era el turno de los pequeños de la casa, que ya llevan una semana saliendo una hora al día para corretear y disfrutar, aunque sea sin sus amigos. Su horario, el más amplio, de 12.00 a 19.00 horas, tiene sus ventajas y desventajas, porque el soleado y caluroso día de ayer hizo que muchos padres buscaran las sombras.
La jornada de ayer transcurrió con normalidad y sin incidentes reseñables, salvo las aglomeraciones y alguno que otro que se saltó las restricciones. Algo que tampoco es novedad y que viene sucediendo desde que comenzó el confinamiento y que es motivo de sanción. Aunque la policía ayer se dedicó a informar también firmó varias multas por estas infracciones.