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El uso obligatorio en el transporte público se estrena con pocas discusiones sobre la medida pero con algunos usuarios aún despistados que la desconocían La Policía las repartía en las paradas
El transporte público se empezó a llenar de mascarillas ayer, en el que era el primer día de la fase 0 de la desescalada en Aragón y el resto de España. Ahora, llevar la boca y la nariz cubiertas es un requisito obligatorio para acceder al autobús y al tranvía. Y en Zaragoza, en el estreno de la medida, había quien estaba al corriente de la situación y quien andaba despistado, quien pensaba que la medida se habría tenido que adoptar antes, o no, y todos ellos a favor del uso de esas mascarillas. Poca discusión hay en eso.
Marisol Guerra usa el transporte público con frecuencia, en especial para desplazarse hasta su trabajo. Considera que el uso de la mascarilla tenía que «haber sido obligatorio desde mucho antes» y que si hay gente que sigue sin hacerlo es por imprudencia: «Creo que vista la situación tenía que haberse impuesto desde el primer día y que hay gente que no lo usa porque es muy inconsciente. Más información de la que hemos tenido y de la que tenemos no creo que pueda ser posible», expresa.
Miguel Ángel Santos se muestra de acuerdo en que la medida se tendría que haber tomado antes, aunque destaca el civismo de la gente y cree que quien todavía no usa la mascarilla es por descuido: «Creo que se tendría que haber adoptado esta medida cuando comenzó la expansión del coronavirus. Ahora ya lo veo tarde, aunque sigue siendo necesario y por lo general se está cumpliendo, la gente es bastante consciente de la situación y de lo que tiene que hacer para que esto termine aunque todavía hay gente que es un poco despistada o que se hace la despistada, pero son los que menos», explica.
Por otra parte, Luisa Matilde Naudín reconoce que le parece bien «que se empiece a usar mascarilla en el transporte público», aunque aconseja «usarla también para ir por la calle y en los lugares cerrados». En este sentido, considera que la mayoría de la gente sí que está empleando las mascarillas en bus y el tranvía: «Yo lo que veo cuando voy a bajar al perro a la calle es a la gente que va en el autobús, y hasta hoy mismo he visto a una persona dentro que no llevaba mascarilla y se supone que era obligatorio».
Mientras, según las fuentes oficiales de Avanza, todo trans
Muchos opinan que debería haber sido obligatorio «antes» y se quejan de los que no se protegen
curría «dentro de la normalidad desde que comenzó la fase inicial de la desescalada». «Por ahora no hemos visto ningún incidente reseñable, y sobre todo habría que destacar el civismo de los ciudadanos y la responsabilidad con la que se están comportando ante estas circunstancias».
Sin embargo, José Manuel Montañés, presidente del comité de empresa de Avanza Zaragoza, remarcaba que «si el uso de mascarillas obligatorio conlleva que se aumente el número de personas en los autobuses es algo lamentable que amontonen a la gente en el bus». «Los conductores están pidiendo no dejar gente en las paradas, y que no se amontone la gente en los autobuses. Eso sería usar el sentido común, pero llevamos 15 días proponiendo al ayuntamiento la posibilidad de usar el 100% de nuestra flota para no dejar a nadie en tierra, y ellos han estado mirando para otro lado».
Una polémica a la que el consistorio respondía negándolo y los vehículos que hay en circulación «se consideran suficientes en estos momentos para atender a la gente que se está moviendo en el transporte publico». «Lo que no podemos es estar pasando autobuses vacíos por la calle», aseguraban. Y añadían: «A partir de hoy se puede subir la mitad de la gente. Entendemos que el servicio sigue siendo suficiente y cuando la actividad económica vuelva a su ritmo normal se pondrá al 100%. Lógicamente autobuses hay bastantes, que ellos quieran que esté al 100% de su capacidad es otra cosa, pero lo que el ayuntamiento considera es que la oferta de autobuses es la correcta en relación con la demanda, y más ahora». Su objetivo es analizar cómo evoluciona la situación, pero por el momento aseguran no estar recibiendo quejas ni les consta que «haya gente que se haya quedado en tierra en las paradas». «Si hubiera un problema real lo sabríamos, ahora mismo no hay un problema, más allá de una situación propia de un estado de alarma, pero confiamos en que poco a poco se pueda ir normalizando todo», concluían.
El caso es que el uso obligatorio de mascarillas no admite discusión, y en ello se volcó también la Policía Nacional, entregándolas en las paradas durante horas, hoy volverán, para que nadie se despiste y cumpla.
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«Todo está dentro de la normalidad. No hay incidentes reseñables», resalta Avanza