Paradoja en la cantera
La fuga de varios jugadores contrasta con el salto al primer equipo de Francho, Buyla y Baselga El club estudia cómo frenar esas salidas
La fuga de varios canteranos, al menos seis, revelada por este diario el pasado lunes ha confirmado el enfado que hay en el club con esta situación, donde se admite que se están planificando y organizando medidas para evitar que eso se pueda repetir en los próximos años, asegurando que la cantera del Zaragoza no está para formar futbolistas para otros equipos. Lógicamente, la Ciudad Deportiva, con Lalo Arantegui como director deportivo y Ramón Lozano como coordinador, necesita de una mayor inversión, y eso requiere el ascenso y los mayores ingresos de la élite, para tener más posibilidades de retener a esos futbolistas. Y todo en unos años donde la cantera ha sido protagonista con muchos saltos al primer equipo.
Esas fugas de talento no habían sido de la misma magnitud en los últimos veranos, teniendo en cuenta que ahora se va a dar la salida, sin pagar traspaso alguno, del extremo Luis Forcén, jugador del Deportivo Aragón y una de las joyas de la cantera del Zaragoza en los últimos años, que se marcha al Atlético, donde también recalan
Daniel Martínez y Adrián González, central y lateral izquierdo del cadete A, para jugar en el juvenil en el club colchonero, mientras que Hugo Buyla, cadete B en esta temporada y hermano del jugador del Aragón Nick, se marcha al Deportivo Alavés y Juan Hernández se va al infantil del Barcelona, igual que el jugador alevín Sidney So Delgado, que también aterrizará en La Masía.
Pero esa desbandada llega en el momento en que se mantiene la apuesta por dar cabida en el primer equipo a canteranos. El Zaragoza anunció hace un mes el paso de Francho Serrano de cara a la próxima temporada, firmando un contrato hasta el 2024, dando el salto desde el juvenil a la primera plantilla, mientras que el centrocampista Nick Buyla y el delantero Marcos Baselga, ambos del Deportivo Aragón, también estarán en el primer equipo, aunque saldrán cedidos si el Zaragoza logra el ascenso.
Ambos han llegado a un acuerdo para firmar hasta el 2024. Buyla, que llegó del Tudelano en el verano del 2017, es internacional por Guinea Ecuatorial y debutó con el primer equipo la temporada pasada ante el Extremadura y este curso jugó en Copa en Socuéllamos.
Baselga es uno de los jugadores que más veces ha entrenado a las órdenes de Víctor, pero su estreno no se produjo hasta el partido de Copa ante el Nástic. Con 21 años, el ariete zaragozano ha anotado 18 goles en 22 partidos de este curso con el Aragón. El delantero Iván Azón o los laterales Francés y Borge, al igual que el punta Luis Carbonell serían los siguientes en dar el salto, aunque no en la próxima temporada.
Desde la llegada de Lalo Arantegui a la dirección deportiva en febrero del 2017 han dado el salto al primer equipo con ficha profesional jugadores como Pombo, Lasure, Delmás, Álex Zalaya o Guti en la 17-18, mientras que Pep Biel y Soro lo hicieron en la 18-19. Estos dos últimos trajeron dos traspasos el verano pasado, al Copenhague y al Real Madrid, por 4 y 2,5 millones de euros respectivamente, más posibles incentivos en ambos casos.
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El mundo del fútbol experimentó ayer su propia sacudida. La plantilla del Eibar emitió un comunicado en el que expresa su rechazo a reanudar la actividad y su «miedo» a las «terribles consecuencias» que podría acarrear el regreso de la Liga. Nadie hasta ahora, en el fútbol profesional, se había expresado con tanta rotundidad. La postura del Eibar provocó la reacción inmediata de LaLiga. Su presidente, Javier Tebas, repitió la misma frase de hace 15 días: «Jugar a fútbol será más seguro que ir al súper». Mientras, el club eibarrés anunció que hoy los jugadores se someterán a los test y que el sábado volverán a los entrenamientos individuales.
Los jugadores y técnicos del Eibar piden «garantías» y «responsabilidad» ante el temor de contraer y contagiar el covid-19 jugando a fútbol, una actividad en la que, subrayan, no podrán «cumplir la primera recomendación de todos los expertos: el distanciamiento físico». Dos jugadores de la plantilla del Eibar, que prefirieron mantenerse en el anonimato, reconocieron a este diario que hacía días que estudiaban tomar una postura respecto a la vuelta a la actividad y al final decidieron apoyar el comunicado.
«Nos inquieta que, por hacer lo que más nos gusta, podamos contagiarnos, infectar a nuestros familiares y amigos, e incluso contribuir a un nuevo brote de la epidemia, con las terribles consecuencias que ello conllevaría para toda la población», manifiestan los jugadores. La plantilla opina que «lo primero debe ser la salud de todos y es momento de que esa idea prevalezca con hechos, no únicamente con palabras. Pedimos garantías y responsabilidad», sostienen.
Los futbolistas del Eibar dicen ser unos «privilegiados» porque disfrutan «entrenando y jugando cada minuto», motivo por el que aclaran que «quieren jugar». «Pero antes que futbolistas somos personas, y como a gran parte de la sociedad nos preocupa la situación sanitaria». Reconocen que es cierto que «millones de trabajadores han vuelto a sus tareas, con mucha menos atención
Luis Forcén encabeza una lista de al menos seis jugadores que se van este verano
El ministro de Cultura y Deporte aseguró que entiende la preocupación de los futbolistas
y muchos menos medios sanitarios» que los futbolistas, ya que muchos de ellos regresarán a sus puestos de trabajo «sin unas garantías mínimas».
Cuando LaLiga respondió / que jugar a fútbol será más seguro que salir a comprar, se produjeron diversas respuestas. Una de las más contundentes fue la del doctor García Cota, del Celta y de la selección española, muy crítico con el protocolo de LaLiga: «Jugar a fútbol no será tan seguro como dicen, y quien quiera entenderlo ha de pensar en un córner, con 15 jugadores metidos en el área. No creo que eso sea seguro, aunque todos perdamos si no se juega».
Mientras, el ministro de Cultura y Deporte, José Manuel Rodríguez Uribes, aseguró que entiende perfectamente «la preocupación» que puedan tener los futbolistas respecto a la vuelta a los entrenamientos porque es la que tiene el Gobierno, cuya prioridad «es la salud y el derecho a la vida», y por ello, dejó claro que se podrá «culminar LaLiga» si se cumplen los criterios sanitarios dictados por el Gobierno.
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