El coronavirus logra que no se aparque en las aceras
Lo que ningún peatón había logrado con sus reivindicaciones lo ha conseguido el coronavirus. El Ayuntamiento de Zaragoza ha decidido que no se va a poder aparcar en las aceras con la idea de que haya más espacio para caminar y poder mantener así el distanciamiento social que imponen las autoridades sanitarias. Bienvenida sea la decisión porque en los últimos meses las aceras, especialmente del centro, se habían llenado de bicis y motos, más o menos bien aparcadas, y de otros vehículos de movilidad personal, como los patinetes, dejados de cualquier manera en un espacio que molesta y mucho. Para eso hacen falta aparcamientos en lugares estratégicos y eso es lo que el consistorio va a desarrollar ahora. Personas mayores, con problemas de movilidad y con minusvalías van a ser también los grandes beneficiados. Solo hace falta que los que dejan esos vehículos lo hagan con conciencia social.