Cierra el albergue de Tenerías
Los usuarios que quedaban han sido realojados en Alonso V y el Refugio
El albergue «milagro» del pabellón municipal de Tenerías cierra sus puertas. Estas instalaciones se abrieron el 17 de marzo (se montaron en tan solo 8 horas) y han servido para acoger a las personas sin hogar que quisieran pasar el confinamiento resguardadas. Ahora, de los 33 internos que quedaban, 13 serán realojados en el albergue municipal de la calle Alonso V y 20 en el Refugio.
Todas estas personas, eso sí, van a seguir en cuarentena y no van a poder salir de las instalaciones en las que se internen, al menos por el momento. El objetivo es reducir al mínimo el riesgo de posibles contagios ya que muchas de estas personas sufren patologías que podrían verse agravadas con el coronavirus.
Durante los próximos días las brigadas municipales y el personal de limpieza procederán a desinfectar y retirar todos los materiales utilizados en este albergue provisional. Serán almacenados y estarán listos para su uso en caso de que haya un rebrote y estas instalaciones tengan que volver a habilitarse.
En el momento de más ocupación el pabellón de Tenerías llegó a acoger a 90 personas. De ellas, según informó el concejal de Acción Social, Ángel Lorén, 30 han encontrado trabajo en campañas agrícolas gracias a las labores de inserción social llevadas a cabo por los trabajadores municipales que atendían el centro. Solo en los últimos días cinco de estas personas han encontrado una oportunidad laboral en La Almunia, recolectando fruta.
Asimismo, Lorén anunció que las duchas instaladas en el pabellón del centro deportivo Santo Domingo seguirán funcionando y que cuando se cierren habilitarán una alternativa porque se trata de un servicio «necesario». Por otra parte, tanto el alcalde, Jorge Azcón, como Lorén se congatularon de que, «por el momento», ninguna de las personas que permanecían en el albergue provisional volverán a la calle, ya que todas han encontrado una alternativa habitacional de la mano de diversas entidades sociales. «No sabemos qué será de ellos en un futuro, pero es un primer paso», dijo Azcón.
Sí que reconocieron ambos la preocupación de que el número de personas sin hogar crezca debido a la nueva crisis económica y social. «El número de personas atendidas no era tal desde la crisis del año 2008», aseguró el alcalde, por lo que el consistorio está elaborando un plan «dirigido a continuar los procesos de inserción social».