«Es importante lograr victorias, empezando por el Zaragoza»
Francisco Rodríguez, nuevo ▶▶ entrenador del Girona, aseguró ayer en su presentación que ha llegado a Montilivi «con una ilusión y una ambición terribles para conseguir el objetivo que el club se marcó el primer día de esta temporada: ascender a Primera División». También remarcó que el equipo está «a tiempo» de conseguir «las cinco o seis victorias» que le podrían dar el ascenso directo, pero también que «hay que ser realistas» y que, para conseguirlo, «lo importante es conseguir victorias, empezando por el Zaragoza, e ir partido a partido a partido», subrayó el preparador almeriense. que estamos mostrando ante un rival muy duro, muy complicado y construido para ser campeón, con un presupuesto monstruoso». Todos los duelos que restan «son finales» y el de Montilivi «va a ser un partido que nos va a exigir lo mejor de nosotros».
En cuanto al Girona, por un lado Víctor Fernández no sabe por dónde puede salir el equipo catalán tras la destitución de Martí y la llegada de Francisco: «El cambio de entrenador seguro que vendrá acompañado de una alteración en la motivación y ánimo de los jugadores por querer demostrar que pueden corresponder esa confianza, pero hay poco tiempo para poder percibir modificaciones importantes a nivel de organización táctica. Somos conocedores de cuáles son las condiciones técnicas individuales de los jugadores del Girona, que son de los mejores jugadores de Segunda, y el juego que nos pueden mostrar, pero tenemos respuestas», concluyó.
☰ Todos los clubs ponen un decidido énfasis en señalar las acciones que les son desfavorables y jamás se refieren a las que les han ayudado. Todos hablan de que quieren la ecuanimidad y la justicia arbitral cuando en realidad todos desean que las decisiones polémicas les favorezcan. En el fondo, se trata de un problema de falta de cultura deportiva de base de imposible solución. Al que ahora se añade uno nuevo: el desastroso uso del VAR en España. La herramienta es fantástica, su protocolo de utilización, incomprensible e inadmisible.
En ese escenario, de presión institucional, con varias decenas de millones de euros en juego en estos 16 días y herido en el orgullo por la derrota, se mide el Real Zaragoza al Girona con otras cuentas pendientes, estas estrictamente deportivas y de obligatoria