El Periódico Aragón

La responsabi­lidad es de todos y espera que el equipo reaccione

- SERGI LÓPEZ-EGEA eparagon@elperiodic­o.com ALBA ADRIÁTICA

domingo en el Príncipe Felipe (17.00) y buscar un revulsivo desde dentro para dar la vuelta a la situación. Mientras, la dirección técnica le está buscando un base para reforzar al equipo y poder afrontar con mayores garantías, al menos, el tramo de competició­n del que vaya a ausentarse Sulaimon. La llegada de un uno permitiría recomponer un poco la rotación de los exteriores y liberar a Ennis de esa función, en la que no ha estado nada cómodo.

Así, el trabajo está ahora tanto en la pista como en los despachos. Sobre el parquet, cuerpo técnico y jugadores deben buscar soluciones a los problemas que han mostrado en las últimas jornadas. En las oficinas, se intensific­a el rastreo del mercado tanto para encontrar el jugador que necesita el equipo como para estar preparado en caso de más cambios.

En carrera (( -

Juan Bilbao llegó hace muchos años a Tarragona para trabajar en una fábrica del Alt Camp desde su Gernika natal. Pocas personas que vivan en Cataluña saben de ciclismo como él. Y lleva mucho tiempo alertando sobre la calidad que atesora su sobrino de 30 años, que se ha propuesto luchar por la general del Giro de Italia. Va tercero y afirma que no renuncia a nada.

Hay quien se toma el Tour como el examen del año. Todo para llegar a París lo más arriba posible de la tabla amarilla. Sin embargo, para Pello Bilbao, el ciclista de Gernika como su tío Juan, la ronda francesa tuvo un doble cometido. De un lado se trataba de ayudar a su amigo y jefe de filas, Mikel Landa, y de otro coger la forma exquisita con la que ha llegado al Giro para llevar los galones y liderar al Bahréin. «Estoy muy contento por la primera semana del Giro porque tenía dudas de cómo estaría después del Tour. Pero he podido trabajar bien para estar en la posición del Giro en la que me encuentro», afirma Bilbao en la primera jornada de descanso de la ronda italiana, a orillas del mar Adriático.

Bilbao, tercero de la general porque el neerlandés Wilco Kelderman le birló el domingo unos segundos en la explosiva rampa final en los Abruzos, ha llegado a la prueba sin la atracción que levantan las grandes figuras. Se podría decir que apareció en la general casi por sorpresa y comenzó a escalar posiciones en silencio y sin hacer ruido, para que nadie se fijase en él como si fuese un corredor de paso de los que se caen de la clasificac­ión cuando aumentan las dificultad­es en una carrera de tres semanas.

Pero lo suyo no ha sido una casualidad, como si hubiera sonado una flauta. Lo suyo es un trabajo hecho a conciencia. ¿Puede fallar? Por supuesto. Nadie está libre de pecado, de caer en las garras de una pájara, pero los periodista­s italianos ya comienzan a preguntar aquello de «¿quién es Pello Bilbao?» porque quieren conocer datos de un ciclista del que solo sabían hasta ahora que había sido sexto de la general de la carrera en el 2018 y que el año pasado se desentendi­ó de la general y se centró en ganar etapas; dos victorias.

Junto a Cavendish

 ?? AFP / LUCA BETTINI ?? Pello Bilbao, en la ruta en una de las etapas del Giro de Italia.
AFP / LUCA BETTINI Pello Bilbao, en la ruta en una de las etapas del Giro de Italia.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain