Sanitarios...
Por fin tenemos una Estrategia de Prevención del Suicidio que, como señalaba Ana Lahoz en su magnífica información en EL PERIÓDICO, tiene un objetivo muy claro: salvar vidas. Una estrategia multinivel que compromete a otros departamentos porque no solo es un problema sanitario sino social, decía un responsable. Bueno es que la salud, acudiendo a la OMS, implica también tener en cuenta el bienestar social, y no solo lo físico. Reducir lo sanitario a lo físico y olvidar los factores psíquicos y sociales es caer en el biologicismo, y como decía un catedrático de Psiquiatría de nuestra universidad, alguna razón hay para que la Facultad de Veterinaria sea distinta a la de Medicina. Pero esto se dice mucho y se olvida pronto. En fin, está bien. Se nota que hay una médico al frente del departamento que sabe lo que se hace. A ver si con ella conseguimos fortalecer la sanidad aragonesa dotando las plantillas adecuadamente tanto en Atención Primaria como en la hospitalaria. Conozco personal sanitario que se ve obligado desde hace años a prolongar su jornada laboral por pura ética profesional. A ver si se acaban los contratos basura de días o por horas y dignificamos las condiciones laborales de todos esos que han estado dando la cara y la siguen dando. Queremos seguir teniendo un magnífico sistema sanitario, así que menos experimentos de gestión al estilo del PP. Para acabar con la sanidad pública están ellos. La izquierda para lo contrario, para garantizar la igualdad en el acceso a los derechos. Por cierto, he visitado esta semana mi centro de salud (La Bombarda) y me he encontrado unos profesionales, sin excepción, entregados, competentes, cariñosos. Yo diciéndoles que no les quería dar más trabajo y ellos empeñados en sacar matrícula de honor. Y lo consiguen todos los días. Eso no tiene precio.
*Profesor de la Universidad de Zaragoza