Los pilares de Nadal
La madre, la hermana y la esposa tienen gran peso en sus éxitos
Rafa Nadal sigue haciendo historia en el tenis gracias a su talento, fuerza mental, resistencia y técnica, pero una de las mejores armas del rey de la tierra es, sin duda, su familia. Toni Nadal, durante 27 años su entrenador, preparador físico, técnico y psicológico, fue en todo ese tiempo su apoyo más visible. Pero además de él, son su madre, Ana María Parera, su hermana, Maribel, y su mujer, Mery Perelló, sus grandes pilares. Quedó patente el domingo cuando, tras casi tres horas de partido y hacerse con el trofeo, Rafa no reprimió las lágrimas, se acercó a la grada y se fundió en un emotivo abrazo con las tres. A su esposa, además, le dio un efusivo beso.
La madre de Nadal es hija de una conocida familia de Manacor dedicada al negocio del mueble, aunque ella decidió desvincularse para montar una perfumería, que mantuvo hasta que su hijo empezó a jugar torneos de la ATP.
Desde entonces, siempre que puede acompaña a Rafa a los torneos. Uno de los peores momentos que atravesó la familia fue cuando se divorció, en el 2009, de Sebastián Nadal, su marido durante 20 años y padre de sus dos hijos.
Maribel Nadal mantiene una estrecha relación con su hermano, que conoció a su mujer a través de ella, ya que iban a clase juntas al colegio en Manacor. La joven, de 28 años, se licenció en Administración y Dirección de Empresas en el 2010 y empezó a trabajar como becaria en Endesa. Maribel siempre ha estado al lado del tenista, suele acompañarle en los torneos y es su gran talismán. Ambos se unieron todavía más para superar juntos la separación de sus padres.
En marzo saltó la noticia de que Maribel había roto con Pep Juaneda Grimalt, tras seis años de relación y planes de boda. Sin embargo, en julio la revista ¡Hola! afirmó que la hermana del tenista mantenía un romance con Javier de Miguel, madrileño de 37 años, que triunfó como modelo cuando tenía 16 años.
SIEMPRE CON DISCRECIÓN La relación de Rafa Nadal y María Francisca Perelló, que ahora se hace llamar Mery después de muchos años en los que se la conocía como Xisca, se ha caracterizado siempre por su discreción. Ambos se conocieron durante la adolescencia y su noviazgo empezó tiempo después coincidiendo con el inicio de la carrera de Nadal en la élite del tenis. La primera imagen de ambos juntos se captó en el 2005, durante la gala de entrega de los premios deportivos Siurells. Ese mismo año, hicieron su primera aparición pública en Roland Garros.
Como su marido, la joven nació en Manacor, el 7 de julio de 1988, dos años después que él. Es hija única. Su padre es Bernat Perelló, un constructor, y su madre, María Pascual, es funcionaria en el Ayuntamiento de Manacor. Mery estudió en la Universidad de las Islas Baleares Administración y Dirección de Empresas.
Durante este tiempo vivió en Palma, en un piso compartido con una compañera, novia de un amigo de Rafa. Se le ve en pocos actos públicos y siempre intenta pasar desapercibida ante los medios. No suele conceder entrevistas, pero cuando lo hace es para hablar de la Fundación Rafa Nadal, de la que es directora de estrategia y relaciones institucionales.
La pareja se comprometió en mayo del 2018 mientras disfrutaban de una romántica escapada a Roma y se casaron el 19 de octubre del 2019. Se dieron el en una ceremonia celebrada en Sa Fortaleça, un castillo del siglo XVII situado en Pollensa, al norte de su Mallorca, con la presencia de más de 500 invitados, entre los que se encontraban los reyes eméritos y numerosos rostros conocidos.
Ahora, tras haber conseguido su decimotercer título en Roland Garros, el campeón mallorquín y su mujer se encuentran descansando en París, con planes de celebrar su inminente primer aniversario de boda en la absoluta intimidad.