Estados
Antonio Nadal Pería
La palabra «estado» tiene varios significados: situación en que se encuentra alguien o algo, cada uno de los estamentos en que se considera dividido el cuerpo social, clase o condición a la cual está sujeta la vida de cada uno, país soberano, conjunto de poderes y órganos de Gobierno de un país, y algunos más.
La DGA no descarta pedir el estado de alarma en Aragón para frenar los contagios. Estado de alarma en Madrid contra el criterio del Gobierno autonómico. Portugal decreta el estado de calamidad ante la subida de contagios de covid-19. Toque de queda en París y otras ciudades en Francia para frenar la rápida progresión del coronavirus. El virus es un enemigo mundial contra el que se está luchando de distintas formas según afecta a los países y la determinación de sus dirigentes. Donde unos ven la necesidad de extremar las restricciones, otros las creen exageradas. Algunos han comparado esta pandemia global con una tercera guerra mundial, con un enemigo común invisible, cruel y muy letal.
El estado de emergencia decretado en Tailandia es distinto, allí se pretende frenar las protestas contra el Gobierno. Si desconocíamos que existieran tantos tipos de estados, ya empezamos a enterarnos: de alarma, de calamidad, de emergencia, de guerra, de excepción, de sitio, de catástrofe, de prevención, toque de queda. El estado de alarma al que obliga la pandemia se puede comparar a un estado de guerra, pues todos los días nos informan del número de bajas, ya sea por contagios o por fallecimientos.
No son menos los tipos de estado que padecemos los humanos. Nuestros estados son de ánimo, de bienestar, de gracia, de inocencia, de merecer, de necesidad, de buena esperanza. En la situación en que nos encontramos por culpa de la pandemia, en confinamiento o con derechos limitados, un estado más que probable es el de la depresión, otro es el de temor a relacionarse con los demás, quienes apenas salen de casa, te esquivan si te cruzas con ellos en la calle y ni siquiera te saludan si no se respeta una distancia prudencial.