Por un nuevo comienzo en la Champions
El Casademont visita al Lublin polaco con «tranquilidad y energía», según Sergio Lamúa
El Casademont Zaragoza buscará esta tarde (18.30 horas, Aragón TV) en el Globus Arena de Polonia dar continuidad a las buenas sensaciones que el equipo dio en el último partido de la Liga Endesa frente al UCAM Murcia. Para esto, tendrá que dejar atrás el recuerdo de los dos últimos choques que pusieron fin a su paso en la Basketball Champions League de la temporada 2019-20 y también a las primeras jornadas de la Liga española. El rival para esta nueva oportunidad es el MKS Start Lublin Basketball, que lidera la clasificación de la primera competición polaca este curso.
El conjunto zaragozano parte como uno de los favoritos del Grupo D, ya que, aunque estará condicionado por los largos desplazamientos y este poco convincente arranque en su competición, demostró la temporada pasada que puede dar pasos adelante en la Champions. Su primer rival, por contra, es una cara completamente nueva para Europa. El Start Lublin se ve en la misma tesitura con la que se encontró el Casademont en la pasada campaña, con un reto emocionante como es la competición europea, nada que perder y mucho que ganar.
«Para la mayoría de los aficionados no es conocido», aseguró Sergio Lamúa, entrenador ayudante en el equipo aragonés, pero también advirtió de que «tiene cinco jugadores a nivel exterior con mucha versatilidad y buen uno contra uno». El técnico, buen conocedor de las debilidades de su equipo, cree que este aspecto les puede «complicar» si no «frenan» a cada uno de sus jugadores y habrá que hacerlo con los disponibles para Diego Ocampo.
Ya son conocidas las bajas de Justiz, Krejci y Sulaimon. Llegó para contrarrestarlas Luka Rupnik, que tuvo oportunidad de debutar en el partido frente al UCAM Murcia, aunque solo testimonialmente, durante minuto y medio, y todavía está por descubrir el protagonismo que quiere darle Diego Ocampo. Después de este encuentro, Lamúa confesó que el equipo llega «con tranquilidad y energía» ya que, una vez inmerso en la dinámica derrotista y las lesiones, un chute de adrenalina como fue la victoria del domingo es la esperanza a la que aferrarse en el nuevo inicio.
GRANDES ESPERANZAS $ El objetivo de llegar lo más lejos posible no se ha perdido. Lamúa aseguró que el grupo tiene «mucha moral de cara a hacer una buena competición» y que va a intentar «superar los baches que lleguen, ya sea por la situación a nivel social como por la complicación de los rivales». Una de las complicaciones que pueden encontrarse en la Champions es la brevedad de la fase de grupos después de las modificaciones por la pandemia, que fijan cuatro rivales en cada uno de los ocho grupos.
Este factor van a aprovecharlo los del equipo polaco, según el ayudante de Ocampo, ya que «en un grupo corto las victorias en casa van a ser muy importantes para conseguir esos dos puestos y pasar a la siguiente fase, y van a intentar hacerse fuertes ante su público». No solo esto, sino que, al ser debutantes, «todo el mundo empieza con las máximas energías y ganas», añadió, quizás, recordando a la plantilla del curso pasado.
El Casademont Zaragoza necesita reforzar su autoestima tras derrotar al Murcia en la ACB, y qué mejor manera de hacerlo que con una victoria en el inicio de la competición que más ilusión aportó al equipo en la temporada pasada. Dejar atrás los resultados adversos y también las malas sensaciones que ha dejado el equipo en el regreso a la competición es lo que daría vida a una plantilla que dejó entrever algo de luz en el partido frente a los de Sito Alonso.