Un iceberg como Londres se separa de la Antártida
El gigantesco bloque de hielo se acabó de desprender el pasado viernes Los científicos llevaban una década observando las sucesivas grietas
Un enorme iceberg de 1.270 kilómetros cuadrados, el tamaño del área metropolitana de Londres, se ha desprendido de la plataforma de hielo Brunt de 150 metros de espesor, casi una década después de que los científicos del British Antarctic Survey (BAS) detectaran por primera vez el crecimiento de vastas grietas en el hielo antártico.
La plataforma de hielo Brunt es la ubicación de la estación de investigación Halley de dicha institución británica de vigilancia antártica. Los científicos de BAS, que han estado esperando el desprendimiento durante al menos una década, estiman que es poco probable que la estación se vea afectada. El equipo de 12 personas que trabajaba en la instalación fue desalojado a mediados de febrero.
La primera indicación de que el desprendimiento del iceberg era inminente se produjo en noviembre del 2020 cuando una nueva grieta, llamada North Rift, se dirigió hacia otra gran grieta cerca de Stancomb-Wills Glacier Tongue, a 35 kilómetros de distancia. North Rift es la tercera grieta importante en la plataforma de hielo que se abre en la última década.
En enero, la grieta avanzó hacia el noreste a una velocidad de hasta un kilómetro al día, cortando la plataforma de hielo flotante de 150 metros de espesor. El iceberg se formó cuando la grieta se ensanchó varios cientos de metros en pocas horas en la mañana del pasado viernes, 26 de febrero, liberándolo del resto de la plataforma de hielo flotante. La estructura de esta vasta plataforma es compleja y el impacto de los eventos de «partos» es impredecible, según informó BAS.
En el 2016, la institución tomó la precaución de reubicar la estación de investigación Halley a 32 kilómetros tierra adentro. Desde el 2017, el personal se ha enviado a la estación solo durante el verano antártico, porque durante los meses de invierno la evacuación sería difícil. Las grietas Chasm 1 y Halloween Crack no han crecido en los últimos 18 meses.
«Nuestros equipos en BAS han estado preparados para el nacimiento de un iceberg de Brunt Ice Shelf durante años. Monitoreamos la plataforma de hielo a diario utilizando una red automatizada de instrumentos GPS de alta precisión que rodean la estación y miden cómo se deforma y se mueve la plataforma de hielo –explicó en un comunicado Jane Francis, directora de British Antarctic Survey–. También utilizamos imágenes de satélite de la ESA, la NASA y el satélite alemán TerraSAR-X. Todos los datos se envían a Cambridge para su análisis, por lo que sabemos lo que está sucediendo incluso en el invierno antártico, cuando no hay personal en la estación, está completamente oscuro y la temperatura cae por debajo de menos 50 grados».
«En las próximas semanas o meses, el iceberg puede alejarse o podría encallar y permanecer cerca de Brunt Ice Shelf. La estación Halley está ubicada tierra adentro de todas las grietas activas, en la parte de la plataforma de hielo que permanece conectada al continente. Nuestra red de instrumentos GPS nos dará una alerta temprana si el desprendimiento de este iceberg provoca cambios en el hielo alrededor de nuestra estación», añadió Francis.