A un ser querido
Fernando Marcén Letosa Zaragoza
Eras conocido, durante toda tu vida laboral y deportiva como Isidoro, así lo atestiguan los excompañeros del trabajo en Telefónica y todos los entrenadores, directivos, jugadores y mandatarios de nuestro fútbol regional, que tuvieron el placer de conocerte; en ellos, al igual que en otros muchos, dejaste una huella imborrable. Han sido muchos, los años compartidos con tu familia y tu pasión por el fútbol; ambos, familia y fútbol eran el complemento idóneo para ser feliz y a ciencia cierta que lo fuiste. Pero la vida, tan caprichosa e incomprensible, decidió una mañana, privarnos de tu saber, de tu buen hacer, dejándonos el llanto en los ojos, con lágrimas que resbalan por nuestras mejillas, con un sabor agridulce, mezcla de admiración, dolor y respeto. Con el corazón afligido, te deseamos que allá donde estés, disfrutes de la misma felicidad que todos hemos compartido contigo. En un rincón de nuestra alma, seguirá iluminado tu recuerdo, compartiendo la pena que tu adiós nos ha traído. Gracias, por lo mucho y bueno que nos has transmitido. Para ellos siempre serás Isidoro, para nosotros, Josemari, para todos, un ser querido.