Denunciados por usar armas de caza de forma irregular
Los sospechosos disparaban a botellas de agua en un camino
El Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil (Seprona) de Ejea de los Caballeros ha denunciado a dos personas por el uso de armas de caza de manera irregular, es decir, fuera de la actividad cinegética, en un camino de uso público de Uncastillo (Zaragoza).
La investigación se inició tras la visualización, el pasado 26 de marzo, de dos vídeos, publicados en redes sociales, donde se observaba a los denunciados efectuando disparos al aire para impactar contra botellas de agua de cristal lanzadas por sus acompañantes, informa el instituto armado en una nota de prensa.
En uno de los vídeos se observaba a una persona que con una escopeta de caza efectuaba disparos a dos botellas de cristal en dirección a un camino de uso público y, acto seguido, con un rifle realizaba la misma acción contra una garrafa de agua en dirección a un campo de labor. Estas acciones que se efectuaron fuera de la actividad cinegética para la que están autorizadas estas armas de fuego.
Junto a esta persona se hallaban otras dos, que no portaban mascarilla ni respetaban la distancia de seguridad interpersonal.
En la visualización del segundo vídeo se observó a otro varón que, portando un rifle y apoyado en un remolque de perros, efectuaba hasta 13 detonaciones, tampoco relacionadas con la caza, y en el que aparecen también otras personas sin mascarillas y sin respetar la distancia de seguridad.
El Seprona logró identificar a las personas que efectuaron los disparos, realizados el 21 de marzo, una vez terminada la temporada de caza, en el término municipal de Uncastillo.
La Guardia Civil procedió a decomisar la escopeta y el rifle utilizados en dicha actividad y denunció a ambas personas por una supuesta infracción al Reglamento de Armas en concordancia con la Ley Orgánica 4/2015, de 30 de marzo de Protección de la Seguridad Ciudadana.
Los hechos han sido puestos en conocimiento del Servicio Provincial de Sanidad del Gobierno de Aragón por incurrir cada uno en una supuesta infracción a la Ley General de Salud Pública.
Las dos armas eran propiedad de la misma persona, quien se las había dejado al segundo denunciado para dicha acción.
El uso inapropiado de las armas de caza está prohibido por la ley. Los tiros realizados por los sospechosos, bien fuera en prácticas irregulares de tiro o como diversión, comprometía la seguridad de terceras personas que se pudieran encontrar en esos momentos cerca de los lugares elegidos. De ahí que se trate de actividades que revisten un riesgo intrínseco al poder poner en peligro la integridad física de otros ciudadanos.