El primo de Almeida se libra de la imputación
Según el juez, se limitó a facilitar el correo de la encargada de las compras
El instructor del caso de las mascarillas del Ayuntamiento de Madrid, el juez Adolfo Carretero, ha descartado imputar al primo del alcalde de Madrid, José Luis Martínez–Almeida, que fue quien facilitó un contacto del consistorio a Luis Medina para la venta de productos sanitarios, y ha acordado interrogarle como testigo el jueves para que aclare si su intervención supuso «trato de favor».
En un auto, el magistrado afirma que Carlos Martínez–Almeida «se limitó a proporcionar a Medina el correo electrónico de la encargada de las compras sanitarias del ayuntamiento, Elena Collado, quien fue la que negoció y firmó en nombre de la Funeraria Municipal (del Ayuntamiento de Madrid), los mencionados contratos», sin que conste que ejerciera ningún tipo de presión, necesaria para que existiera un delito de tráfico de influencias. No obstante, considera «conveniente su testimonio para conocer el modo en que los investigados contactaron con la persona encargada de la contratación en el Ayuntamiento de Madrid, y si hubo algún trato de favor», añade la resolución.
El magistrado tomó declaración ayer a la directora de la universidad CIS, María Díaz de la Cebosa, que facilitó a Luis Medina el contacto de Carlos Martínez–Almeida, primo del alcalde. La testigo admitió haber facilitado al hijo del duque de Feria el contacto del primo del alcalde, si bien aseguró que ignora qué ocurrió con él, salvo que Medina le mostró un artículo de prensa sobre el contrato.
La directora de la sucursal del Deutsche Bank, en la que Medina ingresó el millón de euros que recibió de comisión, y el director de la oficina de Caixabank, en la que Alberto Luceño, sus cinco, se ratificaron en que pidieron a los comisionistas documentación sobre el origen de esos ingresos y por la que están imputados también por falsedad documental.