Siete funciones en diferentes espacios de la capital de Ecuador, Quito
La compañía aragonesa Teatro Arbolé volverá con sus títeres a América Latina en el mes de junio para actuar en Quito (Ecuador), en el XXI Festival Internacional de Títeres Con bombos y platillos. Realizará un total de siete funciones desde el día 11 al 19 de junio en diferentes espacios de la ciudad. Con su participación en este encuentro, Teatro Arbolé reanuda sus giras a América Latina, interrumpidas durante la pandemia, ya que esta compañía es muy querida y apreciada en estos países de honda tradición titiritera. Sus obras para títeres de cachiporra gozan de una enorme popularidad y son muchos los grupos latinoamericanos que montan estas piezas en sus países.
Y es que la aragonesa es una de las compañías invitadas a participar en la cita con siete funciones en diferentes espacios de esta ciudad de los espectáculos Las aventuras de Pelegrín, para el público infantil y familiar; y Tragedias de amor y cuernos, una obra para el público adulto. Este encuentro recupera este año la presencialidad, ya que la pasada edición se celebró de forma virtual.
Pelegrín, el popular personaje del Teatro Arbolé es el protagonista de Las aventuras de Pelegrín, un espectáculo de títeres de cachiporra, con sus mil y una aventuras. Es un títere aventurero y pendenciero y con la cachiporra realmente resuelve sus entuertos como a veces hay que hacerlo: abriendo la cabeza a la gente, no tanto para hacerles daño, sino para hacer que les entren las
El grupo tiene programadas
ideas. Los títeres de cachiporra son un clásico del teatro que tiene sus claves en la participación y el diálogo con el público, en el ritmo frenético de sus muñecos, y en el efecto catártico de la cachiporra. Con Pelegrín, Teatro Arbolé ha llevado el arte de estos títeres a su máxima expresión, con un universo muy personal, lleno de tradición y vanguardia, que nunca envejece y que divierte y fascina a una generación tras otra.
Por su parte, Tragedias de amor y cuentos recoge dos textos inmortales de la tradición titiritera: Los cuernos de Don Friolera, de Valle-Inclán; y El retablillo de Don Cristóbal, de Lorca; los dos contados a la manera del bululú gallego. Es decir, el ciego, que hace de su cuerpo y su capa retablo, se apoya en los muñecos para recuperar la esencia del teatro. Las dos historias vienen introducidas por las coplas al vino de Nicanor Parra. Ciego, vino y muñecos se mezclan para recobrar la tradición más genuina del juglar. Unir tradición y vanguardia es el objetivo de este espectáculo unipersonal a cargo de Iñaqui Juárez en un magnífico ejercicio del títere popular de guante.
Antes de esta cita en Sudamérica, el Teatro Arbolé viajará a diversas localidades españolas, ya que esta compañía se halla inmersa en una gira nacional que la llevará desde mayo a junio a realizar 23 funciones en diversos municipios del país.