En modo precampaña
Luis Solanas Cebolla Zaragoza
Después de escuchar buena parte del debate de Feijóo y Sánchez en el Senado, me reafirmo en que los líderes políticos están en modo precampaña, importándoles muy poco llegar a acuerdos, sobre asuntos domésticos cruciales como: la luz, el gas, la inflación, los salarios o los impuestos.
Ellos a lo suyo, a contentar a sus parroquias y seguir con sus mutuas descalificaciones, agravios e improperios varios, no vaya a ser que, lo que prometieron que era dedicarse más a proponer y construir, les coja con el pie cambiado y eso lo paguen en las encuestas. Teniendo como objetivo en mayo las autonómicas y municipales y para noviembre o diciembre las generales del año que viene, es hora de que la maquinaria propagandística vaya engrasándose ya que tiene que aguantar dos campañas prácticamente seguidas. Yo reconozco que a veces dan ganas de mandarles a todos a paseo, bastante tenemos la clase media y trabajadora con conservar nuestros empleos y llegar justo a final de mes, como para tener encima que aplaudir y tragarte toda la sarta de mentiras y medias verdades que nos van a contar unos, otros y los de más allá. so o por defecto, que es tanto como decir que pasan con más pena que gloria y se sitúan donde más les conviene para que no se les vea el plumero.
En cualquier caso, de nada sirve ser muy inteligente si no somos capaces de percibir, captar y gestionar las emociones, si no sabemos cómo actuar en situaciones de emergencia, o si nos ahogamos en un vaso de agua.
Es entonces cuando la inteligencia y las emociones deben interactuar para superar las dificultades, para encontrar las mejores soluciones en cada caso. Es entonces cuando hay que poner en valor la inteligencia emocional, que es la inteligencia por excelencia.