IU alerta de la «creciente desigualdad» y exige al Gobierno intervenir
Sanz pide cumplir los pactos y subir los salarios de los trabajadores
Álvaro Sanz, portavoz de Izquierda Unida en las Cortes de Aragón, puso ayer el foco en esa parte de la sociedad aragonesa que se está quedando atrás. El único portavoz de izquierdas que está en la oposición alertó de la «creciente desigualdad» en la comunidad y de que «la brecha entre ricos y pobres se dispara». La respuesta pasa, reclamó, por la «intervención desde las capacidades del Gobierno de Aragón» en la mejora de las condiciones laborales de los trabajadores y la garantía de unos servicios públicos robustos.
«Seis de cada diez aragoneses tienen problemas para llegar a final de mes, y eso pese a contar con las reformas laborales y el escudo social desplegado por el Gobierno central», denunció Sanz, que alabó la gestión de la vicepresidenta y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz. Tan solo aquí, en destacar la gestión de la ministra, lograron ponerse de acuerdo el líder de IU y el presidente de Aragón.
Sanz recordó que «14.812 personas acumulan el 72% del PIB de la comunidad, mientras 265.000 aragoneses tienen serios problemas y pueden caer en la pobreza». Esta situación requiere de más esfuerzos desde el Ejecutivo aragonés, consideró Sanz, que recordó que «las grandes cifras macroeconómicas de poco nos sirven si se cimentan en desigualdades».
Por eso Sanz reprochó al presidente su política «de alfombra roja y mesa camilla para la empresas» y
«De poco nos sirven las grandes cifras si se cimentan en desigualdades»
sus escasas menciones a la situación de los trabajadores.
Además, denunció la unión de estaciones de esquí, «que ignora el cambio climático», y los retrasos en la creación de la empresas públicas de energía y farmacia. «Los pactos son para cumplirlos», incidió.
Lambán se defendió diciendo que «la desigualdad es menor en Aragón que en la mayor parte de las comunidades» y aseguró que su «prioridad» es «combatir la desigualdad y redistribuir la riqueza». Palabras que no convencieron al portavoz de IU, que sigue a la espera de que cumplan los pactos ya firmados.