In memoriam de Antonio Reloba Castro
Recientemente ha fallecido nuestro compañero de la Junta Directiva de la Asociación Aragonesa de Psicopedagogía Llevaba unos meses luchando contra el maldito cáncer. Pero al final le ha ganado la batalla y se lo ha llevado por delante con sólo 56 años.
Antonio ha sido un ejemplo para todos nosotros en toda su trayectoria vital hasta el último suspiro. Una persona con una gran inteligencia emocional tanto por su formación, ya que ha realizado varias actividades y ha cursado un máster sobre el tema, como por sus cualidades innatas. Siempre pendiente de las personas que le rodeaban, con una generosidad y altruismo encomiable. Por ejemplo no le importaba reunirnos en su casa de campo para realizar reuniones tanto formales como informales. Lo más reseñable era su implicación con la sociedad. No en vano era titulado en Educación Social por la UNED.
Desde hace 12 años formaba parte de la Junta Directiva de nuestra asociación. Se ha implicado en numerosos proyectos formativos dirigidos a las Asociaciones de Madres y Padres, alumnado y profesorado. Nunca le ha importado desplazarse a cualquier localidad aragonesa por lejana que estuviera de su domicilio. Su última actividad ha sido la organización del I Encuentro de Animación
sociocultural y desarrollo rural que llevamos a cabo en Épila el 18 de marzo. Aun estando enfermo y con problemas respiratorios, asistió durante toda la Jornada, dinamizó las mesas redondas, estuvo pendiente de los invitados... En fin, un ejemplo de pundonor, responsabilidad y entrega. Y seguía con la misma ilusión de siempre pues era uno de los ponentes del próximo Congreso Internacional de Inteligencia Emomitismo cional que vamos a llevar a cabo del 18 al 21 de mayo en Zaragoza.
Debemos destacar que a pesar de la enfermedad continuamente mostraba la mejor de sus sonrisas y buen humor incluso hasta sus últimos días, él mismo nos animaba diciendo que todo iba mejor y que el tratamiento estaba surtiendo efecto. Hasta el último hálito ha querido estar consciente para despedirse de sus seres queridos. Tanto su mujer, Piluca, como sus hijos, Víctor y Guillermo, sus siete hermanos, sobrinos y demás familia, así como sus numerosos amigos y compañeros estamos muy orgullosos de Antonio Reloba. Siempre nos quedará su recuerdo de una persona íntegra donde las haya y un ejemplo para todos nosotros.
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*Presidente de la Asociación Aragonesa de Psicopedagogía
Antonio estaba siempre pendiente de las personas que le rodeaban, con un altruismo encomiable