El Periódico - Castellano - Dominical
Correo
Selecciona, comenta y contesta...
OLa conciencia de peligro es siempre desigual. En primer lugar, porque hay peligros que amenazan más a unos que a otros. En segundo lugar, porque no todos dedican el mismo tiempo al análisis de riesgos. En tercer lugar, y aquí viene lo peor, porque no todos son capaces de sentir como propio el afán de evitar perjuicios a terceros. Sea por lo que fuere, en lo que llevamos de nueva normalidad se ha hecho evidente que hay entre nosotros quienes han elegido vivir en una dulce inconsciencia respecto de un mal que sigue ahí y podría volver a golpearnos de manera cruel. Hay quien propone que nos zarandeen con alguna campaña contundente. Hay quien lo asocia a la ligereza de la juventud, que se cree inmortal. Quizá lo que falta es inculcar que el bien o es común o no es. compartir momentos con otros, pero ¿por qué nos olvidamos tan pronto del horror? ¿Cómo no recordamos ya las pocas imágenes emitidas de las personas en las UCI? Quizá porque han sido pocas. Dicen que una imagen vale más que mil palabras. Acogiéndome a esta máxima me sorprende cómo hoy el Gobierno no ha invertido en una campaña televisiva sobre lo que implica ingresar en una UCI y las secuelas que, en muchos casos de por vida, parecen dejar tales ingresos por este virus. Señores gobernantes, no esperen más. Ya que «hechos son amores, que no buenas razones» y, viendo que el ser humano elige, a veces, aprender por sufrimiento más que por discernimiento, plantéense invertir en una buena campaña. No servirá para todos, pero con que sirva para