El Periódico - Castellano - On Barcelona
Raquel Gu y la crisis de los 40.
QUE SÍ, QUE sí, que ya lo dice la viñeta: los 40 son los nuevos 30, la edad de la plenitud sexual femenina, el momento de soltarte la melena y atreverte (esto es cosecha propia) con la minifalda que te compraste pero no te ponías a los 25. de pisar con fuerza. Pero, aun así, ¡caray, cómo pesan!
Raquel Gu, nombre de guerra de Raquel Garcia Ulldemolins, licenciada en Filología Inglesa desde que fue a la universidad e ilustradora desde que cogió el primer lápiz, ni recuerda cuándo, llevaba tiempo preocupándose por el momento de soplar las 40 velas. Desde los 38, dice en el prólogo de Estic estupen- da!, el libro que ha escrito para digerir que ahora la llamen señora y tenga que ponerse gafas para ver de lejos. «Todos los que dibujamos y/o escribimos lo hacemos para entender el mundo que nos rodea. Así que cuando sentí que había llegado a la mitad de mi vida y empecé a plantearme cosas [aquello del adónde vamos y de dónde venimos, pero en versión 2.0 o la que sea que corresponde al desquiciado mundo de hoy], una amiga me dijo: ‘¿Por qué no dibujas esas preguntas?’. Me pareció una buena idea, y de ahí salieron 100 viñetas». Lo mismo Raquel se estaba poniendo muy pesada con la inevitable (¿inevitable?) crisis de los 40 o lo mismo la amiga sabía que si plasmaba sus zozobras por escrito no solo se iba a ayudar a sí misma, sino que iba a ayudar a muchas mujeres más. Gran consejo: con este libro, Raquel Gu
espanta el fantasma de la profecía autocumplida de una decrepitud anticipada con grandes dosis de humor y sentido común y un puntito de mala leche para llegar a la conclusión del título. ¿Qué es eso que nos decimos cuando nos encontramos con un amigo de la adolescencia de que estamos como en el instituto? ¡Estamos mucho mejor!
COMPLICIDAD CON LOS NIÑOS
Para seguir los pasos de Raquel Gu como ilustradora no solo hay que visitar la librería: también colabora en los medios Jot Down, Núvol y El Salto, entre otros, y vale mucho, mucho la pena buscar sus incursiones en el mundo de los niños, con títulos como Dracàleg, Monstràleg y Més que mascotes. « Son un público bestial: no tienen filtro y puedes establecer un juego de complicidades muy creativo
con ellos», dice. También puedes lograr que dejen de temer a las mates, algo a lo que se dedica Gu en el blog que tiene a medias con Clara Grima, Mati y sus mateaventuras, que, ríe, le ha hecho superar el trauma que tenía con la asignatura. Así puede seguir sumando sin angustias. Tanto años como haga falta. –