Bebercio sobre hielo

ICE BAR

Si estás resfriado, quizá no sería la mejor opción. Te sentirás como un pingüino en una nevera industrial, pero será lo más cerca que estés del crudo frío escandinavo. El Ice Bar es un clásico de la noche barcelonesa, pero si hay algún despistado que no lo conozca, no estaría de más advertirle de que se trata de un bar de hielo de verdad. Un cubito gi- gante. Un moderno iglú en el que podrás toñarte, pero siempre con la ropa de abrigo adecuada (el propio bar te la proporcionará), que tampoco queremos que salgas de allí con los dedos más congelados que un escalador perdido.

Es el primer bar de hielo de Barcelona, un garito único en su especie en el que, además, encontrarás divertidas esculturas talladas en los bloques que climatizan el espacio. Cócteles, guiños a los 80 y una advertencia: si superas los 45 minutos en sus entrañas, se te congelarán hasta los mocos. Y nada de que- darte dormido en un rincón o acabarás como Jack Nicholson en el final de El resplandor. Ramon Trias Fargas, 2. www.icebarcelona.com