«No creo que afecte nada a Costa, a él le motiva»

Nada más llegar de Salvador de Bahía, Del Bosque se encerró en su habitación. «Sí, vi el partido contra Holanda otra vez. Luego me quedé dormido durante el Chile-Australia y la televisión se quedó encendida toda la noche», explicó el técnico, quien revivió, por voluntad propia, la pesadilla del debut en el Mundial. Un estreno marcado, además, por la titularidad de Diego Costa, un delantero extralos ño en el paisaje de la selección. Tres partidos (Italia, El Salvador y Holanda) donde no ha encajado su juego directo con el fútbol de control, toque y, sobre todo, paciencia que tiene la selección. Aunque se inventó el penalti, Del Bosque lo cambió (entró Torres en el m. 62) para reactivar el ataque. Pero sin éxito.

Costa, además, no solo juega contra la defensa de Holanda sino contra todo un país. Antes de empezar el partido apareció su nombre en el vídeo marcador del Arena Fonte Nova y fue silbado. Luego cada vez que tocaba el balón lo abroncaban. Y cuando se asomaba en busca de la pelota, también. Otro problema más para España. «No creo que le afecte nada. Conociéndole, no le afectará, lo doy por seguro», anunció con firmeza Del Bosque. «Ya lo silban en los campos de España. A él le motiva toda esta historia», añadió después para no perder a su nueve el primer día.