Márquez: «Yo no tengo miedo a correr, no»
Rossi: «Marc me hubiese podido pasar tranquilamente»
Austin,Texas, EEUU, tercera estación del Mundial de MotoGP. La cita después del polémico Gran Premio de Argentina en el que la fogosidad de Marc Márquez (Honda) lo puso todo patas arriba, especialmente con su encontronazo con Valentino Rossi (Yamaha), que se fue al suelo y supuso una penalización para el tetracampeón catalán de 30 segundos, que le impidió disfrutar de un buen resultado, quedándose con el primer cero de la temporada.
Y es en Austin donde los pilotos, en la reunión de seguridad de los viernes, discutirán la modificación de las normas o de las sanciones. La coincidencia general en las muchas declaraciones de ayer, en Austin, fue que es difícil juzgar las acciones de carreras y la aplicación de la sanciones. Y, además, como ha señalado hoy Johann Zarco «estamos hablando de dos dioses, Rossi y Márquez, así que todo se complica mucho».
Márquez reconoció ayer que, en efecto, cometió algunos errores y que de todos ellos aprendió. «Ese es el punto que querría señalar. Yo no ceso de aprender, de analizar y de intentar mejorar. En Argentina pasaron muchas cosas y de todas ellas debemos sacar conclusiones todos y aprender. Yo, por supuesto, sigo dispuesto a pedirle disculpas a Valentino (Rossi), pero también me gustaría que se mejorase, por ejemplo, el lío que sufrí en la salida, pues nadie me supo decir qué debía hacer». Sobre el cambio de normas, Márquez dijo que «esto se parece al fútbol donde es muy difícil ponerse de acuerdo y son muchas opiniones alrededor de una misma jugada». ¿Tiene miedo? «Respeto todas las opiniones, pero yo nunca he sentido miedo».
Valentino Rossi apareció mucho más pacífico que en Argentina. «Lo que dije sobre el incidente, ya lo dije. ¿Qué si le daría la mano a Márquez? No ahora, más adelante puede ser. ¿Qué si somos Prost y Senna?, ellos peleaban por el título, lo de Termas no tuvo sentido, Márquez me hubiese pasado en la siguiente vuelta».