El 43% de las familias de Barcelona no entran en la guardería municipal
La apertura de tres nuevas escuelas el próximo curso elevará la oferta hasta las 8.400 plazas Los barrios más vulnerables contarán con más educadores de apoyo y menos alumnos por aula
U nos 4.000 barceloneses de entre cero y tres años se quedarán, muy probablemente, sin poder ir a una escuela infantil de titularidad municipal el próximo curso 2018-2019. Por falta de plazas. «Este año, en torno al 43% de las familias que solicitaron una plaza en la pública se han quedado sin ella. Aunque el porcentaje cambia según los distritos: en Ciutat Vella la tasa de estudiantes sin plaza es del 28%, mientras que en el Eixample asciende a alrededor del 60%», reconoció ayer Miquel Àngel Essomba, comisionado de Educación en el Ayuntamiento de Barcelona. «La falta de plazas es la principal fuente de inequidad que sufre el sistema de educación infantil en la ciudad», lamentó Laia Ortiz, teniente de alcalde de Derechos Sociales.
Por ello, agregaron ambos representantes municipales, el esfuerzo inversor que ha hecho el consistorio en este ámbito ha sido tan importante. Desde el 2015, recordaron, han aumentado las plazas públicas de guardería y «el presupuesto para atender a esta etapa educativa se habrá duplicado durante este mandato hasta los 20 millones de euros», subrayó Ortiz.
Para la próxima preinscripción escolar, que se abrirá el próximo 2 de mayo, la oferta será de 8.411 plazas, 217 más que el curso anterior gracias a la puesta en marcha de tres nuevos centros educativos: el de Els Encants (en el barrio de la Sagrada Família), el del Canòdrom (en el de El Congrés i els Indians) y el Aurora (en el Raval).
101 CENTROS Con las tres inauguraciones previstas –dos el próximo septiembre y la tercera, la de Ciutat Vella, en enero del 2019–, Barcelona contará el año que viene con un total de 101 guarderías municipales. «Es la primera vez que la ciudad supera el centenar de escuelas infantiles, lo que supone también la mayor oferta pública para la educación 0-3 que hay en España», afirmó Ortiz.
«La previsión es que para el curso 2021-2022, cuando se complete el actual programa de ampliación de la red de escuelas infantiles municipales, en Barcelona haya más niños de hasta 3 años escolarizados en centros públicos que en concertados», apostilló Essomba. Podría ser la única etapa educativa en la que eso ocurra, indicó, ya que en prima-
«La falta de plazas es la principal fuente de inequidad de la educación infantil», afirma Laia Ortiz
ria y secundaria el peso de la privada sigue siendo superior al de la pública (aunque en los últimos tiempos también se están aproximando).
«Cada escuela infantil tiene un coste de 620.000 euros anuales y es incomprensible que el esfuerzo para financiarlas solo recaiga en las familias y en el ayuntamiento, después de que la Generalitat se desentendiera por completo de ellas», prosiguió la segunda teniente de alcalde del equipo de Ada Colau.
Por el momento, el consistorio sigue a la espera de que los tribunales se pronuncien sobre la demanda presentada en enero pasado contra la Conselleria d’Ensenyament por el impago de 41,8 millones de euros comprometidos entre los cursos 2013 y 2017. «La primera infancia debería ser una preocupación de to- dos, una corresponsabilidad del conjunto del país», remachó.
Entre las novedades para el próximo curso en Barcelona destacan los planes sociales que se van a desarrollar en la nueva guardería Aurora, que incorporará dos proyectos piloto: uno de diversificación horaria con un grupo de niños solo de mañana o solo de tarde, y un servicio de espacio familiar socioeducativo para atender a las familias con niños en situación de riesgo que ofrecerá 45 plazas, detalló Essomba. «Estas actuaciones aportarán indicadores para extenderlos a más guarderías de la ciudad», agregó el comisionado.
DEL 2 AL 14 DE MAYO Además, en 19 guarderías situadas en barrios con elevada vulnerabilidad social «se crearán espacios socioeducativos para apoyar a las familias y se revisarán las ratios para reforzar el trabajo de los docentes y mejorar la atención a los niños», explicó. Algunos centros del norte de la capital catalana (como Ciutat Meridiana o Torre Baró) contarán con refuerzos de educadores sociales, cuyo cometido será también el de trabajar junto con las familias, indicó Essomba.
La preinscripción, que durará del 2 al 14 de mayo, podrá realizarse este año por vía telemática, «con lo que el proceso se simplificará enormemente». Se mantiene, asimismo, la vía presencial tradicional, es decir la entrega de la documentación en la guardería elegida en primer lugar. «Lo que sí haremos es reducir el papeleo», garantizó.