El Espanyol vuelve a sonreír en Montilivi
Dos goles de Gerard Moreno en el debut de Gallego complican el sueño europeo del Girona
Sacó petróleo el Espanyol en Montilivi en el estreno de David Gallego en el banquillo y se llevó el llamado derbi de Sant Jordi gracias a la efectividad de su santo particular, Gerard Moreno, autor de los dos goles que tumbaron al Girona en un partido dominado casi de principio a fin por los de Machín, que estuvieron negados como nunca en los últimos metros por culpa de la falta de puntería y también por Pau López. El 0-2 de ayer fue un mazazo para el sueño europeo de los locales, que la noche anterior había cobrado fuerza con la victoria del Barça en la Copa, que abre al séptimo clasificado las puertas de la Europa League.
Machín puso en liza a su once más reconocible tras dosificar a la mayoría de titulares en Mendizorroza. Entró incluso Ramalho, que no viajó a Vitoria por una sobrecarga muscular. En el Espanyol, la revolución que inició el club el viernes con la destitución de Quique Sánchez Flores y Jordi Lardín no continuó sobre el césped. Gallego se decantó por una alineación con algún retoque en el dibujo (una especie de 4-3-2-1), con tres cambios respecto al último partido y con Sergio García en lugar de Baptistao como movimiento más llamativo.
En la primera parte, el Girona fue el de toda la temporada en Montilivi, con muchas virtudes y pocos defectos. Y el Espanyol, el de todo el curso lejos de Cornellà, con muchos defectos y pocas virtudes más allá de la solidez defensiva. Sin embargo, al descanso se llegó con victoria de los visitantes, que aprovecharon su única aproximación en el área de Bounou en los primeros 45 minutos, en una acción a balón parado ejecutada por Darder y culminada por Gerard. La posición del goleador blanquiazul era ilegal por un pie, pero su definición fue mayúscula.
PAU LÓPEZ, PLETÓRICO Estuvo mucho mejor el Girona, que mantuvo casi en todo momento bajo control a Sergio García, Jurado y, con la excepción del 0-1, a Gerard. Cuando los de Machín aceleraron las acciones, el Espanyol sufrió de lo lindo y se salvó gracias a los reflejos de Pau López, que evitó dos goles cantados en dos intervenciones pletóricas de reflejos tras dos remates a bocajarro de Juanpe, con el pie (m. 31) y de Pere Pons con la cabeza (m. 45).
Los locales llegaron a atosigar al Espanyol, con siete córneres en la primera media hora, con internadas por la izquierda de la pareja MojicaBorja García y sobre todo por la derecha con Maffeo y Portu. Pese a los paradones de Pau, la ocasión más clara fue para el murciano, que cabezeó Bounou Maffeo Portu Ramalho Pere Pons Borja García Bernardo Granell Stuani Juanpe Mojica
P. Machín (5). Olunga (5) por Bernardo (m. 66); Aday (6) por Borja García (m. 69); Aleix Garcia (5) por Granell (m. 79).
(m. 42) controla en fuera de juego a pase de Darder y dispara cruzado. (m. 55) asistido por Darder, bate con un sutil toque la salida de Bounou. Alberola Rojas (4), castellano-manchego. Carlos Sánchez (m. 37), Víctor Sánchez (m. 47) y Aday (m. 72). Montilivi. 12.313.
solo en el área pequeña a fuera cuando Montilivi cantaba el gol (m. 21). Tras el 0-1, el mismo Portu tuvo la posibilidad de empatar, pero no acertó a conectar bien con la izquierda una falta medida de Granell (m. 44).
Se esperaba un Girona acelerado
David Gallego (7). Baptistao (5) por Jurado (m. 57); Granero (5) por Darder (m. 70); Dídac (5) por Aarón (m. 80).
tras el descanso. Pudo empatar en una acción de Portu (m. 51), pero enseguida los locales recibieron el mazazo definitivo en la segunda vez que el Espanyol pisó el área local en todo el partido. De nuevo funcionó, esta vez en ataque organizado, la conexión entre Darder y Gerard Moreno, que definió de fábula ante Bounou (m. 55).
CANSANCIO LOCAL El Girona notó mucho anímicamente el segundo gol visitante. Y cuando pudo meterse de nuevo en el partido volvió a estrellarse contra su propia ineficacia. No entró un disparo de Maffeo, ayer el mejor de los locales (m. 56); Naldo sacó bajo palos lo que parecía el 1-2 de Stuani (m. 68) y no acertó Olunga con toda la portería para él (m. 69). El keniano fue el primer recurso de Machín para darle la vuelta al partido y Aday, el segundo. El Espanyol, cada vez más sólido con el 0-2, acabó cerrando bien las filas ante un rival cada vez más cansado. El Girona no tuvo ya gasolina para su tradicional arreón final y el Espanyol acabó celebrando tres puntos que cierran definitivamente su permanencia y endulzan un curso catastrófico de los blanquiazules lejos de Cornellà.