Colau, en la ONU: «La vida de las ciudades está en peligro»
La alcaldesa presenta una declaración de grandes urbes para promover las viviendas asequibles Recuerda que para que el Gobierno de Sánchez reciba su apoyo es esencial que regule el alquiler
Ada Colau lanzó ayer un mensaje urgente en la sede de Naciones Unidas en Nueva York para alertar sobre el proceso de gentrificación y especulación inmobiliaria que está transformando las grandes ciudades del mundo. «Ahora mismo la situación es crítica. La vida en las ciudades está en peligro», dijo la alcaldesa de Barcelona. Colau enunció los principios de una declaración promovida por Barcelona y suscrita por otras metrópolis como Nueva York, Berlín, París o Seúl para reclamar a los Estados mayores inversiones en vivienda asequible y un aumento de las competencias municipales para combatir la especulación inmobiliaria de los grandes capitales y fondos de inversión. Una especulación que, según la alcaldesa, no solo atenta contra el derecho a la vivienda sino que pone en jaque la sostenibilidad del modelo económico urbano.
«Sufrimos un proceso de especulación global, un proceso de financialización de la vivienda a cargo de grandes fondos de inversión y capitales que se mueven sin fronteras y sin control», dijo Colau durante una mesa redonda en la que también participaron los alcaldes de Montreal y Montevideo. «Significa que se encarece la vivienda para nuestros ciudadanos. Significa unas subidas de precio cada vez más abusivas. Significa miles de desalojos. Significa que pone en peligro la vida de las personas en nuestras ciudades».
INICIATIVA DE GRANDES CIUDADES / La líder de Barcelona en Comú llegó a Nueva York después de visitar Londres y París en las dos últimas semanas para buscar apoyos a la declaración presentada ayer bajo el lema Ciudades para una vivienda adecuada. Una iniciativa que ha impulsado también como copresidenta de Ciudades y Gobiernos Locales Unidos (CGLU), la mayor red de municipios del mundo. Su pretensión es involucrar a los estados para que tomen medidas firmes para regular el mercado inmobiliario o transfieran esas mismas competencias a las ciudades. «Los Estados tienen que entender que somos sus principales aliados para encontrar soluciones, pero necesitamos más competencias para regular el mercado e impedir la especulación», dijo la alcaldesa durante su discurso.
La alcaldesa explicó que el aumento abusivo de los precios, del alquiler y de la vivienda en propiedad, no solo está expulsando a las familias con menos recursos de los centros de las ciudades. También afecta a las clases medias y empresas de sectores estratégicos como el tecnológico, que tienen dificultades para que sus trabajadores encuentren casa cerca de sus puestos de trabajo. «El impacto que esto tiene en el modelo de ciudad es trágico. No podemos permitirnos perder a la ciudadanía porque entonces perdemos el alma de la ciudad», dijo Colau.
La declaración también reclama mayores inversiones en vivienda pública para prevenir la exclusión y dar oportunidades a las legiones de sintecho que abundan en las grandes ciudades. Una política que tiene que ir acompañada de servicios sociales y una planificación adecuada para evitar la segregación socioeconómica y aliviar las tensiones entre los centros de las ciudades y la periferia. Colau señaló que el esfuerzo no solo debería centrarse en la financiación pública y privada. También
deberían explorarse fórmulas como la vivienda cooperativa y la vivienda comunitaria.
APOYO AL 30% DE VIVIENDA PROTEGIDA La alcaldesa quiso subrayar que la cooperación entre grandes urbes ya está dando algunos resultados. «Barcelona ya ha aprobado inicialmente una regulación que prevé que cualquier nueva promoción de vivienda reserve un 30% de espacio a la vivienda asequible. No nos lo hemos inventado nosotros. También se está haciendo en Londres, Montreal o París con éxito», dijo Colau en una cita posterior con la prensa. «Pero también hemos constatado con estas ciudades que no es suficiente. Tenemos que regular el mercado inmobiliario. Es urgente. Y estamos interpelando al Estado porque no tenemos la competencia, algo que sí tienen París o Berlín para limitar las subidas abusi- vas del alquiler». En su encuentro, la semana pasada, con la alcaldesa de París Anne Hidalgo, para recabar su apoyo a su iniciativa ante la ONU, Hidalgo sostuvo que en la capital francesa, pionera en tomar esta medida, los propios promotores inmobiliarios han acabado apoyándola tras mostrar su rechazo inicial.
La alcaldesa considera que la llegada al poder de Pedro Sánchez abre una «ventana de oportunidad» para frenar la especulación. «El Gobierno de Sánchez sabe que para mantener nuestra complicidad en esta nueva etapa, nuestra prioridad es regular el alquiler», dijo, tras acusar al PP de «negarse completamente a poner límites a la especulación». En ese sentido, apoyó el proyecto de ley presentado por Unidos Podemos en las Cortes para alargar la duración de los alquileres y poner coto a las subidas de precio abusivas.
Ada Colau ALCALDESA DE BARCELONA
«Tenemos que regular el mercado inmobiliario. Interpelamos porque no tenemos la competencia»
«No podemos permitirnos perder a la ciudadanía porque entonces perdemos el alma de la ciudad»