¿Dónde se ha metido ‘Albert Macron’?
CARLOS llegó al Elíseo plantando cara a la extrema derecha. Algo no encaja LEONARD BEARD
Hubo un tiempo en que Ciudadanos soñaba con emular la victoria de Si un partido surgido en apenas un año había logrado imponerse frente a los partidos tradicionales y revolucionar el centro en un país tan ideologizado como Francia, ¿por qué no podría repetir tal hazaña
en España? Durante los últimos años, Ciudadanos se ha tomado en serio Europa y ha cosechado importantes victorias. Desde combatir las mentiras del independentismo en el exterior –con la expulsión incluida de CiU y sus sucedáneos de la familia liberal de la que formaban parte– hasta la tan ansiada integración de
en el mismo grupo que los liberales en la Eurocámara.
Estos días, el prestigio y la influencia de Ciudadanos en el exterior se resiente conforme se conocen las noticias que llegan desde
España. Si la emergencia de Vox fue una mala noticia, que recuerda a las experiencias vividas en tantos países europeos donde la extrema derecha lleva tiempo al alza, la decisión del PP y Ciudadanos de integrar a Vox en su suma de mayorías desde el primer día ha sido una pésima señal.
En una entrevista que hice a
en marzo del 2018 en Bruselas le preguntaba si le gustaría imitar el camino emprendido por el presidente de Francia. Me dijo que «ganó a
yendo de cara, diciendo: vamos a debatir intelectualmente entre tu modelo y el mío. Yo me siento más cómodo en eso». También comentaba que el presidente francés, desde el centro, había roto las reglas del juego y me repitió aquello de que «[en Ciudadanos] también estamos rompiendo esa vieja dicotomía entre rojos y azules».
y el partido que dirige de una forma muy personalista se han mirado en el espejo de
hasta que les han puesto delante a Vox, la versión española de Si el francés llegó al Elíseo plantando cara a la extrema derecha, el líder de Ciudadanos parece decidido a llegar a la Moncloa apoyado sobre ella. Algo no encaja.
El liberalismo europeo está en alza. Ha sido la fuerza política que más ha crecido tras las elecciones europeas. Con la llegada de En Marche, el nuevo grupo –rebautizado como Renew Europe– es el tercero de la Eurocámara. El número de primeros ministros liberales también crece. Suman casi tantos (seis) como socialistas (siete) y populares (ocho). La impronta de es fuerte y su experiencia frente a inspira a unos y otros: el combate del populismo no admite atajos para preservar las sociedades abiertas y plurales que son el orgullo de Europa en este mundo repleto de trumps, salvinis y abascales.
Cuanto más tenía que ganar Ciudadanos en Europa, más complicadas se le están poniendo las cosas con su incomprensible decisión de renunciar a la centralidad y aceptar a la extrema derecha como su aliado natural. La conquista del poder no debería merecer la pena si se dejan por el camino las esencias.