El Periódico - Castellano

El minibar del infierno

Histórico y diminuto –42 metros cuadrados– refugio metalero de Poblenou desde hace 36 años, acogió un triple cartel de sonidos extremos y volumen atronador MARTÍ FRADERA

-

colisión acelerada y aplastante de thrash metal y hardcore-punk con continuos cortes de ritmo, desata pronto un nuevo lleno.

Hoy no habrá ni una mujer en el escenario, pero seis u ocho espectador­as capitanean la brutal danza.

grita una. Es broma, pero cruzar hacia el lavabo a media canción es un suicidio. El guitarra y bajista tocan de espaldas al público. No es timidez; es para no recibira lgún zurriagazo. anuncia el

Y a su cantante. lado Max Cavalera parece Ed Sheeran con paperas.

El Ceferino abrió en 1983, época de escasas restriccio­nes cívicas. Entonces ocupaba todo el callejón y la juventud se ponía tibia a sangría y cerveza hasta las cinco de la madrugada. Edu García era uno de ellos hasta que, con 21 años, se quedó el negocio. Desde el 2012 programa cien conciertos al año. Sí, hay una notable demanda de locales para miniconcie­rtos extremos. Octopuss Produccion­s, la promotora que monta el de hoy, nació en enero y ya ha programado 40. Quiere impulsar el plantel undergroun­d catalán de bandas quemueven unas 50 personas. Por lo oído hoy, hay nivel y futuro.

Camisetas en el callejón

El puesto de venta de camisetas y cedés está en el callejón; no, eso ya no cabe en el bar. Custodiánd­ola están los portuguese­s Undersave con aspecto cansado. En una semana han tocado en Segovia, Salamanca, Marsella y Vitoria. Empiezan su faena death metal, pero solo entra a verlos el público más adulto. Los amigos de Dentellada y Primal Necromancy se quedan charlando al aire libre. Los lisboetas son más estáticos y técnicos. Arquean las piernas y se enfrascan en digitacion­es complejas que alargan en piezas de ocho minutos. Tampoco se entiende al cantante, pero sus letras hablan de enfermedad­es mentales y de la arrogancia humana. agradece un fan.

reclama alguien. Es prácticame­nte todo lo que han tocado. Harán un bis para los 15 que aguantan en el bar antes de recoger los bártulos y poner rumbo a Albacete. A las once han terminado. Da vergüenza remarcarlo, pero, una vez más, no habrá problemas de evacuación ni alboroto alguno. En la calle, los metaleros se mezclarán con los que salen de ver al grupo de folk celta Gwendal y al venezolano Alex Ferreira en Razzmatazz 2 y 3. Y todos tan felices.

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain