Emma Coronel Aispuro
ESPOSA DE JOAQUÍN ‘EL CHAPO’ GUZMÁN
La ‘influencer’ de 31 años y mujer del narcotraficante mexicano ha sido detenida en EEUU por su implicación en narcotráfico internacional y por ayudarle en su huida de prisión en 2015 y planear otra en 2016.
Estados Unidos detuvo el lunes pasado a Emma Coronel Aispuro, la esposa del narcotraficante mexicano Joaquín Chapo Guzmán, acusada de implicación en narcotráfico internacional. Coronel, de 31 años y con doble nacionalidad mexicana y estadounidense, fue arrestada en el aeropuerto internacional de Dulles, en el estado de Virginia, cerca de Washington.
La acusada tenía previsto comparecer ayer por videoconferencia ante un tribunal federal de la capital estadounidense, la Corte del Distrito de Columbia, según el comunicado del Departamento de Justicia.
La esposa del Chapo, que atrajo atención mediática cuando acompañó a su marido durante su juicio en Nueva York entre 2018 y 2019, está acusada de «participar en una conspiración para distribuir cocaína, metanfetaminas, heroína y marihuana para su importación a Estados Unidos», indicaba la nota oficial.
En concreto, Coronel afronta una acusación criminal de «conspiración para distribuir un kilogramo o más de heroína, cinco kilogramos o más de cocaína, 1.000 kilogramos o más de marihuana y 500 gramos o más de metanfetaminas, para su importación ilegal a Estados Unidos», precisa.
«Además, se alega que Coronel Aispuro conspiró con otros para ayudar a Guzmán en su escapatoria del 11 de julio de 2015 de la prisión del Altiplano, localizada en Almoloya de Juárez, en México», señala el comunicado.
Una vez que el Chapo fue arrestado de nuevo en México en enero de 2016, su esposa planeó «otra escapada más de prisión» junto a otros socios, antes de que el que fuera líder del cártel de Sinaloa fuera extraditado a Estados Unidos en enero de 2017, asegura el Departamento de Justicia.
El Chapo fue declarado culpable de narcotráfico por un jurado en Nueva York en 2019 y ahora cumple condena a cadena perpetua en una prisión de máxima seguridad de Colorado (Estados Unidos). Hace dos años, Coronel asistió casi cada día al histórico juicio de tres meses de su esposo en Nueva York, mirando y sonriéndole desde el banco del público. Las autoridades no dejaron que la joven lo visitara o hablara con él por teléfono. Tampoco pudo tocarlo durante el proceso, en el que Coronel causó un revuelo al utilizar el móvil de la abogada Colón en la cafetería de la corte, algo absolutamente prohibido.
Cómplice de su marido
Durante el juicio, hubo momentos en que Coronel fue presentada al público como cómplice de su marido. Un testigo que cooperó con la acusación y que fue mano derecha del exjefe del cartel de Sinaloa fue el que confirmó que en 2014 y 2015, cuando el Chapo estaba preso en El Altiplano en México, pasaba mensajes a través de Coronel a sus colaboradores para planificar su fuga a través de un túnel de 1,5 km de largo que llegaba hasta la ducha de su celda.
«Mi nombre fue varias veces mencionado y expuesto en duda», admitió Coronel al culminar el juicio. «De eso solo puedo decir que no tengo nada de qué avergonzarme. No soy perfecta, pero me considero un buen ser humano que nunca ha lastimado a nadie intencionalmente», afirmó entonces. Anunció luego el lanzamiento de una línea de ropa que llevaría el nombre de su marido y sus iniciales, JGL.