Puigdemont queda a un paso de perder la inmunidad en la Eurocámara
La comisión de asuntos jurídicos acepta el suplicatorio del Supremo, que ahora deberá ser ratificado en marzo por el pleno del Parlamento
La tramitación del suplicatorio de Carles Puigdemont, Toni Comín y Clara Ponsatí superó su primer filtro ayer con la aprobación en la comisión de asuntos jurídicos del Parlamento Europeo del informe que recomienda levantarles la inmunidad. El documento, cuyo ponente es el ultraconservador búlgaro Angel Dhambazki, recibió 15 votos a favor, ocho en contra y dos abstenciones, según anunció el presidente de la comisión, Adrián Vázquez (Ciudadanos).
El siguiente paso será la decisión final en el pleno de la Eurocámara durante la sesión plenaria que comenzará el próximo 8 de marzo. Si se aprueba –se requiere una mayoría simple–, supondrá la retirada de la inmunidad parlamentaria y la reactivación de la euroorden contra el ‘expresident’.
La extradición
«Los eurodiputados no pierden su estatus de eurodiputados. Simplemente lo que hace el procedimiento de inmunidad cuando se levanta es que el Parlamento, si es ratificado en pleno, da la notificación al Estado miembro de que estos eurodiputados pueden ser o investigados o llevados a juicio», explicó Vázquez sobre la situación de los tres políticos si el pleno ratifica la recomendación. Es decir, aunque no perderán su condición de eurodiputados, el respaldo permitirá al juez del Tribunal Supremo Pablo Llarena reactivar los procedimientos de extradición que quedaron congelados en Bélgica y en Escocia en cuanto fueron designados eurodiputados.
Un proceso que, a tenor del precedente sentado el 7 de enero en el caso del ‘exconseller’ de Cultura Lluís Puig, podría deparar sorpresas. El Tribunal de Apelaciones de Bruselas ya rechazó la entrega a España de Puig. Los argumentos son los que esgrimieron los tres eurodiputados de JxCat en la audiencia de enero en la comisión de asuntos jurídicos. Es decir, que el Supremo no es el órgano competente para juzgarles en relación con el 1-O y que existe riesgo de vulneración del derecho a la presunción de inocencia, según explicaron fuentes de la defensa.
Estos argumentos no han cuajado y se han impuesto las tesis del ponente: que los hechos por los que se pide el suplicatorio ocurrieron antes de que fueran eurodiputados y, por tanto, no tienen ninguna relación con su actividad como miembros del Parlamento Europeo. El resultado de la votación, de carácter secreto, fue «soportado por una mayoría más que suficiente de miembros de la comisión y todo hace entrever que será algo similar lo que vaya a ocurrir en el próximo pleno del Parlamento Europeo», valoró el eurodiputado socialista Iban García del Blanco.