Messi, los martes al sol
Yo lo siento, pero puede que esté loco, pero loco de atar o tenga algún defecto más a los que ya tengo detectados, pero no pude por menos que ponerme a ver el Manchester City-PSG (4-1 en el global de la eliminatoria, que es cosa seria) con la perspectiva que me ofrecía, no solo el campo lleno de nieve y la granizada que estaba cayendo en Manchester un precioso 4 de mayo en Barcelona, sino el vídeo que Leo Messi o, tal vez, Antonella, publicó en sus redes sociales comiendo, bajo un sol de justicia, en la playa de Castelldefels, en el chiringuito de su amigo Luis Suárez.
Insisto, no voy a negar que, dada la enorme superioridad del fantástico equipo de Pep Guardiola frente al archimillonario PSG (bueno, los dos tienen el dinero por castigo y de procedencia parecida, como diría aquel: les viene de un Estado), me pase el partido pensando (ya les he dicho que algo me debe pasar) en esa postal que, por cierto, si fuese listo (y lo es un ratito) debería utilizar Joan Laporta a la hora de negociar con don Jorge o con Leo: granizando en Manchester y al solecito que más calienta en la playa de Castefa. ¡Cómo se va a ir Messi de Barcelona! ¡Por Dios!
El caso es que dado el repetitivo desastre europeo del PSG, que se ha gastado 2.000 millones de euros en intentar ganar la Champions, que es lo único que le interesa, es posible que al caballero Nasser AlKhelaÏfi, ahora protegido y amigo de Aleksander Ceferin, no se le ocurra otra cosa que romper con la UEFA, llamar a Florentino Pérez y perseguir la Superliga, que igual le sale más barata.
Y, ahora, ¿se irá Mbappé, que menuda semifinal ha hecho: el ridículo en la ida y en la grada, lesionado, en la vuelta? ¿seguirá llorando Neymar para que el Barça lo vuelva a fichar, pese a que le quiere más la prensa que los culés? ¿o Mbappé y Ney le pedirán al jeque o a quien tenga la llave de esa inmensa (e interminable) caja fuerte de los petrodólares que le haga una oferta, de verdad, a Messi?
Insisto, Laporta, si fuese más pícaro e inteligente de lo que parece (y lo es) debería utilizar la postal de los martes al sol, para arañarle un buen pellizco a Leo, que muchas ofertas no debe tener, no.