Unos se vacunan y otros no
Habrá encuentros de la Eurocopa con todos los futbolistas inmunizados y partidos sin jugadores vacunados. No existe un único criterio ni actuación coordinada entre los países participantes.
No existe un único criterio y las selecciones que participan en la Eurocopa han tomado diversos caminos a la hora de vacunar o no a los futbolistas convocados. Ha habido desde intervención gubernamental favorable a inmunizar a los jugadores internacionales, como ha sido el caso no solo de España, sino de Bélgica e Italia, a gabinetes centrales que no han querido dar privilegio a los deportistas, como ha sucedido con los tres equipos británicos que dependen de Londres (Inglaterra, Gales y Escocia) y con Suecia, el primer rival del conjunto de Luis Enrique, a combinados que han dado libertad para recibir el pinchazo a sus deportistas, como por ejemplo ha ocurrido con Francia.
Por lo tanto, habrá cruces de la Eurocopa en el que se encontrarán enfrente 22 futbolistas (al margen de los que participen tras los cambios) totalmente vacunados a encuentros en los que se puede dar el caso de que no haya ningún jugador con el bacilo a cuestas.
Es un criterio dispar, como sucede por ejemplo con las normas de acceso a los estadios que van desde las más rigurosas (en la Cartuja hay que hacerse una PCR se esté o no vacunado) a situaciones como la londinense o la alemana, que no piden ninguna prueba para entrar al campo. O los rusos, que tan solo tomarán la temperatura a los aficionados, mientras sus futbolistas han podido utilizar la marca local de vacuna, la Sputnik V, aunque sin la obligación firme de realizar la toma.
Mientras tanto, al margen de las selecciones británicas y Suecia, hay varios equipos que, por ahora, no tienen intención alguna de administrar el suero a los internacionales. En esta situación se encuentran Dinamarca, Finlandia, Austria, República Checa, Eslovaquia, Macedonia del Norte, Croacia, Suiza, Portugal y Ucrania.
Actuación rápida
Otros países, en cambio, se apresuraron a inmunizar a los futbolistas antes de que el torneo se pusiera en marcha. De este modo, una acción del departamento italiano de Sanidad permitió que los jugadores de la azzurra se vacunasen el mes pasado en hospitales de Roma y Milán.
También quisieron ir rápidos los responsables federativos de Turquía y Polonia para que el riesgo a algún efecto secundario no afectase a los jugadores con la Eurocopa en marcha. Los futbolistas turcos recibieron en mayo la doble dosis de Pfizer, mientras que Polonia vacunó a sus internacionales con la marca Janssen, ya que de este modo solo necesitaban un único pinchazo para inmunizarse.
El caso galo es bastante curioso. En Francia, a diferencia de España, no hay rango de edades a la hora de recibir la vacuna. Los jugadores han podido escoger en un sentido u otro, aunque alguna de sus estrellas, como ha sido el caso de Kylian Mbappé, ha querido exponer en las redes sociales su vacunación. En cambio, los jugadores alemanes han rechazado de forma amplia vacunarse por el miedo a los efectos secundarios.