Los colectivos trans celebran que se desatasque su ley
Confían en que el anteproyecto sea aprobado en el Consejo de Ministros antes del Día del Orgullo, aunque avisan de que aún quedan flecos por cerrar.
Aún no se ha aprobado en Consejo de Ministros y queda un largo y difícil trecho para que la ley trans esté en vigor. Pero después de más de dos años de complicadas negociaciones, en los que se ha recrudecido la oposición de un sector del feminismo a que se reconozca la llamada autodeterminación de género, la meta está cada vez más cerca. Esta es la opinión de los colectivos trans que están participando en las negociaciones del anteproyecto de ley «para la igualdad real y efectiva de las personas trans y para la garantía de los derechos de las personas LGTBI»: La Federación Estatal de Lesbianas, Gais, Trans y Bisexuxales (FELGTB), la Fundación Triángulo y Chrysallis.
Las entidades celebran que el Gobierno de coalición haya llegado a un acuerdo para desatascar el principal escollo: la libre determinación de género. Según el último borrador del texto, cuyo contenido ha sido adelantado por EL PERIÓDICO, se ha acordado una fórmula que permite a una persona cambiarse de sexo en el Registro Civil y, posteriormente, en el DNI, sin presentar testigos o documentación que acredite la «situación estable de transexualidad», que era lo que exigía Carmen Calvo. La Vicepresidencia Primera, Igualdad y Justicia han consensuado que se lleve a cabo una doble comparecencia en el Registro, con tres meses de diferencia, pero no habrá «tutelas o trabas», como reclamaban los colectivos.
En la actualidad para que el DNI refleje el sexo sentido, las personas trans tienen que presentar un informe médico y hormonarse durante al menos dos años, de ahí que se considere un «avance» que en el seno del Gobierno se haya llegado acuerdo sobre el cambio de sexo registral y se prevea aprobar el anteproyecto en el Consejo de Ministros del día 29 de junio, poco días antes de la manifestación principal del Día del Orgullo, efeméride que ha servido para presionar a los negociadores, dado que algunas asociaciones exigieron que el PSOE no fuera invitado por «bloquear» la norma.
Los temas pendientes
«Al desatascar el nudo, se abre la puerta a desatascar otras cosas», señala Mané Fernández, vicepresidente de FELGTB. Y es que aunque ya hay un texto sobre el que trabajar, que fusiona los dos borradores iniciales elaborados por Igualdad, uno para la ley trans y otro para la ley LGTBI, aún quedan flecos, pero los colectivos «confían» en que el texto se apruebe antes del Orgullo.
Las conversaciones pendientes girarán sobre a partir de que edad se podrá ejercer el cambio registral sin requisitos, dado que el borrador contempla los 14 años y los colectivos piden que sea a partir de los 12. Asimismo, hay que perfilar cómo se recogerá el derecho a la reproducción asistida o el centro de memoria histórica, pero son asuntos de menor importancia y que hay tiempo de acordar antes del día 29 de junio.