Como mínimo hubo una falta de información sobre a quién iba dirigida una gincana con temática sexual a la que acudieron menores de edad, cuyos padres denunciarán al Ayuntamiento de Vilassar de Mar.
▶ gárgaras y así se van sobreponiendo las noticias, esperando el otoño en el que, dicen, tendremos que dormir con el anorak puesto y comernos los unos a los otros como yo os he comido, aunque eso será solo hasta que surja una nueva noticia. Por desgracia, el ‘procés’ ya está enterrado y no podemos confiar en él.
–Está también el inicio del curso– apunta el menor de mis hijos, que va a empezar ESO.
El pobre está un poco asustado, le digo que no se preocupe, que, gracias al Gobierno, va a pasar de curso aunque suspenda; y como ya se está reformando la selectividad para que no sea tan dura –a los pobres chavales se les exige incluso saber cosas–, cuando le toque a él superarla, ya consistirá solo en colorear un dibujito sin salirse de la raya. O saliéndose solamente un poco, tampoco vamos a ser tan estrictos. Después llegará la universidad. Eso es más fácil todavía. Ya sé de profesores que actualmente aprueban a destajo para ahorrarse reprimendas de los superiores, que no puede ser que aquí suspendamos tanto, que eso es fallo de quien
La reforma no ha llegado todavía a la vida real, lo cual podría suponer un sobresalto para la nueva generación de españolitos que está a punto de descubrirla, pero estoy seguro de que el Gobierno trabaja también en ello, no va a dejar las cosas a medias. Si estudiar es así de fácil, no va a serlo menos la vida. Urge modificar la vida para que no haya que esforzarse, ni levantarse de la cama para ir a trabajar, ni luchar para conseguir objetivos. Hay que lograr que las empresas dejen de discriminar a los vagos y a los inútiles, que tienen el mismo dere cho que los demás a ganar un buen sueldo. Los desengaños sentimentales quedarán postergados, qué horror, y jamás nadie podrá enfermar, qué miedo, mucho menos morir. Por supuesto, no lloverá el día que tengamos pensado ir a la playa.
–¿Qué os parece, hijos míos?
– Que el volcán se llama Fagradalsfjall.
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Urge modificar la vida para que no haya que esforzarse, ni levantarse de la cama para ir a trabajar, ni luchar para conseguir objetivos