Cucurella, al Chelsea
Con el 9 en la espalda, debajo de su nombre, apareció Robert Lewandowski en el Camp Nou, su nueva casa para los próximos cuatro años, y recibió su primer baño de masas, cuantificable en las 59.026 entradas que habían retirado socios y aficionados. Entusiasmados
El precio por el lateral catalán, procedente del Brighton & Hove Albion, es de 65 millones más 8 en variables. Nacido hace 24 años en Alella, firma por el club londinense después de ser tanteado por el Manchester City. como Joan Laporta, eufórico y vehemente al presentar al fichaje estrella del equipo, convencido de estar participando en un acto «histórico» y estrenando una etapa que vaticinó «esplendorosa».
Es, Lewandowski, el fichaje estrella de los cinco efectuados hasta ahora para que Xavi Hernández devuelva al Barça al máximo nivel. Lo es, Lewandowski, sin ser el más caro (le superan Raphinha, que ha costado 58 millones más 9 en variables y Jules Koundé, 50 más 5) por el historial que ha atesorado en el Bayern de Múnich, y por el privilegio de recibir el número emblemático que hasta el momento lucía Memphis Depay, el 9 de la pasada campaña, y que, como mal menor, cambiará de dorsal. O de equipo, si acepta alguna oferta. El cambio se debe a «razones de imagen y publicitarias que interesan al club», afirmó Laporta, que vio similitudes entre la presentación de Lewandowski con la de Ronaldinho. Más allá de que el polaco fuera capaz de emular las virguerías técnicas del brasileño, entre ellas la de besar el balón cuando hacía filigranas.
«Difícil encontrar palabras»
Le bastó a Lewandowski (pronto tendrá un diminutivo más útil) decir en catalán «Bon dia», «Hola culés» y «Estic molt content d’estar a Barcelona» para recibir las primeras ovaciones con el volumen digno de un gol sobre el césped. «Es difícil encontrar palabras para describir lo que he sentido», reconoció después, ya trajeado en el Auditori.
Un triplete como el triple «Visca el Barça» que pronunció Laporta en su enérgica intervención ante la hinchada, al lado del delantero, dando las gracias y pidiendo
Laporta reiteró sus agradecimientos a Pini Zahavi, el intermediario que ha intervenido