El plan de Luis Enrique era bueno
El gol de Morata en el minuto 88 premió el arreón final de los españoles, que sufrieron en la primera hora. Croacia, Países Bajos e Italia esperan en la ‘Final Four’ que se jugará en junio. Unai Simón y Nico Williams resultaron claves.
Era un riesgo calculado, pero salió bien y el plan de Luis Enrique mete a España en la Final Four de la Nations League. Fiel a su sello de selección de autor y con mucho suspense, en el que Unai Simón fue decisivo sujetando al equipo y con Nico Williams encendiendo el partido y asistiendo a Morata en el decisivo gol que hizo buena la pizarra del seleccionador.
Es complicado descifrar un once de Luis Enrique. No tiene jugadores con jerarquía a los que se aferre en los partidos a vida o muerte. Y eso es tan respetable como discutible. Para este partido cambió la defensa, todo el mediocampo y a su delantero respecto al equipo que cayó en Zaragoza ante
Suiza. Mandando a la grada, para algunos señalados y para otros protegidos, a Eric García y a Azpilicueta.
Sea como fuere, alineó una medular casi inédita con Carlos Soler sumando llegada con Rodri mordiendo y Koke de ancla. Arriba dejó a Asensio como revulsivo en el banquillo con Sarabia generando juego junto a un intrascendente Ferran Torres y a Morata de estilete. Para muchos un equipo elaborado pensando más en el Mundial que en la Nations League. A lo que se sumaba una irreconocible camiseta celeste.
Un polvorón de inicio
Portugal, como digno equipo de Fernando Santos que es, se atrincheró y jugó a salir con velocidad tras robo. Lo que dibujó un inicio con la pelota en los pies de España, especialmente en los de los centrales Pau y un sorprendente Guillamón que no juega en esa posición ni en su club. Los lusos esperaban agazapados el momento de la emboscada con Cristiano liberado en defensa. España no arriesgaba y Portugal no se destapaba. El partido, con 81% de posesión española, era pastoso como un polvorón, con un disparo lejano de Neves como lo único destacado.