Siete años de obras para conectar los Ferrocarrils entre Gràcia y Espanya
La Generalitat licita los trabajos para construir el túnel de cuatro kilómetros que unirá las líneas del Vallès y del Llobregat-Anoia. La prolongación del trazado y las nuevas paradas estaban proyectadas desde hace dos décadas.
La conexión de las dos líneas de Ferrocarrils de la Generalitat de Catalunya (FGC) avanza con la licitación de las obras del túnel y las estaciones. El Govern presentó ayer el proyecto para unir las estaciones de Plaça Espanya y Gràcia, que ya aparecía en la planificación de infraestructuras hace más de dos décadas, aunque los trenes no atravesarán el Eixample para llegar a Gràcia hasta el año 2030, según los cálculos del Departament de Territori. El coste global alcanzará los 430 millones de euros. La prolongación de la L8 de FGC (ahora va de Espanya a Molí Nou) incluirá la construcción de dos nuevas estaciones -Hospital Clínic y Francesc Macià- y la ampliación de las actuales de Gràcia y Plaça Espanya, que ahora ya prestan servicio a la línea del Vallès y a la línea Llobregat-Anoia, respectivamente. El objetivo es mallar todavía más la red de transporte público de Barcelona, fomentar la intermodalidad y, sobre todo, sacar coches de la capital catalana.
La presentación de las obras contó con las máximas autoridades del Govern. El presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, anunció que priorizará «la mejora de la red ferroviaria en todos los ámbitos» y celebró que los numerosos usuarios de FGC en el área metropolitana verán mejorada su calidad de vida. Aragonès advirtió, además, que el ejecutivo catalán está dispuesto a hacer lo mismo «en muchos otros ámbitos», como completar el Corredor Mediterráneo y lograr el traspaso integral de Rodalies, que ve en «una situación con mucho margen de mejora».
Un nuevo metro
El ‘conseller’ de Territori, Juli Fernàndez, destacó cómo este proyecto permitirá «conectar dos realidades» hasta ahora separadas, en referencia a las líneas del Vallès y del LlobregatAnoia. Al mismo tiempo, añadirá «un trocito de metro» a la ciudad
Tarradellas Avenida de
Avda.de Roma
Diagonal
Gran Vía de Barcelona, pues el nuevo tramo de la L8 podrá ser usado como tal. «Era una conexión que faltaba por el centro de la ciudad y todo lo que signifique ampliar la red ferroviaria para luchar contra la emergencia climática será bienvenido», defendió el secretario de Mobilitat i Infraestructures, Marc Sanglas. Los cuatro kilómetros de túnel permitirán que se viaje entre los dos puntos en siete minutos, aunque el gran mérito de la infraestructura será unir dos líneas absolutamente distintas.
Si la del Vallès es comparable a un metro, con trenes cada 2,5 minutos entre Barcelona y Sant Cugat del Vallès a partir del 9 de diciembre, la del LlobregatAnoia ofrece frecuencias menos competitivas y trenes más antiguos. De hecho, la demanda actual de ambos trazados es bastante diferente. La que cruza el Baix Llobregat y llega a Manresa (R5) e Igualada (R6) tiene 23,7 millones de viajeros al año mientras que la del Vallès atrae a 64 millones anuales.
La prolongación permitirá poner en contacto «dos realidades» hasta ahora separadas Los trenes no atravesarán el Eixample para llegar a Gràcia hasta 2030
Viajes más ágiles
Cuando la futura prolongación de FGC sea una realidad dentro de ocho años, si no hay imponderables, la Llobregat-Anoia ganará 14,5 millones de viajes y, la del Vallès, cinco. No obstante, más allá de las estimaciones de de