Batalla vecinal por un ‘hub’ de contenedores
«Nunca nos habíamos quejado cuando había dos contenedores, pero 12 eran demasiados», afirman los vecinos «Esto demuestra que si algo no está bien planificado, se puede rectificar», celebran
Una lectora envió una carta a EL PERIÓDICO en la que protestaba por la «alta concentración» de contenedores junto a su ventana, en el distrito de Sants. Como respuesta, operarios municipales recolocaron ayer parte de estos depósitos en un tramo de la calle con las aceras más anchas.
Tener a mano contenedores para la recogida selectiva resulta cómodo, pues fomenta y facilita el reciclaje, pero nadie quiere tener media docena de contenedores pegados a su ventana. Este es el resumen de la queja de una lectora de Barcelona, Montse Ballester, que envió una carta a la sección Entre Todos de EL PERIÓDICO cuestionando la reciente concentración de depósitos en la confluencia de Portbou con Roger, en el barrio de Badal. Solo diez días después de su instalación, unos operarios del ayuntamiento os han retirado y reubicado.
Con toda la ironía del mundo, Ballester había bautizado este punto como hub de basuras de Badal. «En este cruce con la calle de Roger tenemos seis contenedores a dos metros de las ventanas de una vivienda de planta baja, otros seis contenedores más a 10 metros y seis más a 20», enumeraba en su misiva la lectora, que acompañó su escrito con un detalladísimo mapa.
Sobre el papel, llamaba la atención la cantidad de contenedores apiñados en tan pocos metros. Sobre el terreno, el descontento de los vecinos era comprensible. También su preocupación, pues su colocación en lo que antes era un aparcamiento para motos, enganchado a un paso de peatones, podía generar más de un susto por falta de visibilidad. Se trata de una vía bastante concurrida, entre otras cosas por la presencia de un parvulario y un CAP. «Antes estaban más repartidos por toda la calle, pero ahora todas las molestias las estábamos sufriendo unos pocos», incide Ballester, acaso la principal afectada, pues vive en una planta baja totalmente exterior y soportaba «toda la presión acústica» generada por los camiones de la basura. «Vidrio a las nueve de la mañana, y el resto a la una, a las cuatro y a las seis y media de la tarde», apostilla aliviada tras la pronta reubicación.
Instancia vecinal
La queja vecinal llegó al consistorio antes que la carta de Ballester al diario, pues la lectora previamente había enviado una instancia firmada por los vecinos de su bloque, el 27 de Portbou, y estuvo muy activa en redes estas dos últimas semanas. Así, los técnicos municipales conocían perfectamente la situación detallada por la lectora y confirmaron a EL PERIÓDICO la reubicación de los nuevos modelos «para adaptarlos a las necesidades del servicio».
Este diario asistió a la retirada y posterior recolocación de media docena de contenedores en la parte más baja de la calle, donde las aceras son más anchas y no hay viviendas en los bajos, ante la mirada sorprendida de los afectados, que no esperaban ver en directo la respuesta municipal. Y mucho menos con tanta celeridad. «Esto demuestra que si una cosa no está bien planificada, se puede rectificar. Solo hace falta pasear y escuchar a los vecinos», celebra Joan Salas, presidente de la comunidad, satisfecho con la reacción del ayuntamiento. «Nunca nos quejado cuando teníamos dos contenedores –añade–, pero 12 ya nos parecían demasiados».
Implantación en Les Corts
Otros contenedores, en otros puntos de la ciudad, también podrían ser recolocados si se considera oportuno para, como en el caso descrito en la carta, optimizar su uso y sobre todo minimizar las molestias al vecindario. Las mismas fuentes municipales subrayan que «todas las peticiones de reubicaciones de contenedores se estudian y se da una respuesta sobre la posibilidad o no de hacer un cambio».
La Administración detecta puntos susceptibles de mejora y recoge peticiones y demandas en las reuniones específicas que se han ido organizado a medida que se ha ido implantando la nueva contrata de limpieza y recogida de residuos, que arrancó en octubre de 2021 con un plan de choque previo en 350 puntos repartidos por toda la ciudad. La segunda fase empezó en marzo de este año con el despliegue de la nueva contrata en cinco distritos. En Les Corts, distrito incluido en el segundo grupo, el de la fase 3, recuerdan desde el consistorio, «se implantó en septiembre y todavía están en fase de implantación». En otras palabras, susceptible de reajustes como el que la lectora presenció.
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