Los seis peones de Putin en España
Los cónsules honoríficos de Rusia en nuestro país no son funcionarios y se dedican, sobre todo, a atender a los rusos y a la promoción económica y cultural.
Pedro Mouriño.
Este empresario es cónsul honorario de Rusia en Galicia desde 2020. En junio de 2021, abrió las oficinas en Vigo. Es consejero delegado y fundador de la empresa de inversión IberAtlantic y se dedica a la atención de ciudadanos rusos residentes en Galicia y a la promoción económica y cultural de Rusia. El año pasado, intentó lograr un acuerdo entre el Fondo Ruso de Inversión Directa y la farmacéutica Zendal, con sede en O Porriño (Pontevedra), para comercializar y producir la vacuna Sputnik en España. También hubo contactos con la Comunidad de Madrid, pero su proyecto chocó con la Agencia Europea del Medicamento. Milita en el PP, se define «muy amigo» del expresidente popular Pablo Casado. Es comentarista del canal televisivo Russia Today (RT), con el que el Gobierno ruso difunde sus mensajes en la esfera internacional. Fue observador internacional en el referéndum soberanista de 2014 en Crimea y en unas elecciones en Ucrania. En los últimos meses ha recibido amenazas.
2
Sebastià Roig.
En Baleares, el cónsul honorario de Rusia es promotor y fue director general de Interior del Gobierno autonómico, alcalde de la localidad de Campos y fundador de la oenegé Infants del Món, que durante décadas ha llevado de vacaciones a las islas a niños de orfanatos rusos, muchos víctimas de Chernóbil. Por ello, Putin le distinguió en 2018 con la Orden de la Amistad. En abril, el cónsul honorario anunció que continuaría en el cargo mientras dure la guerra de Ucrania. Su motivo: no dejar desatendidos a los casi 2.000 rusos censados en el archipiélago. El consulado está abierto desde 2017. Meses atrás, al ser preguntado por la guerra, Roig admitió: «Putin me ha decepcionado. No es tonto, pero se ha llegado a una situación desastrosa».
3
Esther Morell.
En Andalucía, la Federación Rusa está representada desde 2010 por esta empresaria dedicada al corcho y la agroalimentación y cuenta con oficinas en Sevilla, Málaga y Marbella. Morell lleva años al frente del consulado honorario. Tomó el testigo de su padre, Héctor Luis, cuando murió en 2008. «Fue el primer cónsul honorario de la Federación Rusa en España».
4
Gonzalo Parada.
El cónsul honorario de Rusia en Canarias tiene dependencias en Tenerife y Las Palmas. En los últimos meses ha tenido problemas judiciales por temas personales. En marzo, confirmó que conocía los incidentes sufridos por unos 30 empresarios rusos afincados en las islas tras la guerra de Ucrania, a la vez que aclaró que su cargo «no tiene nada que ver con el Gobierno de Rusia». «Resolvemos trámites de los ciudadanos de un determinado país en el lugar en el que ahora residen, pero poco más», afirmó.
5 Pedro José Ballvé.
Otro cónsul honorario de Rusia en España, según la web de la embajada rusa y el listado de la de Exteriores, está en Burgos. Ballvé presidió Campofrío, empresa fundada por su padre, hasta julio de 2017. Su vinculación con Rusia deriva, probablemente, de la expansión internacional a la que llevó a Campofrío, que tiene30 plantas repartidas en varios países, entre ellos, Rusia.
6
Ramón Congost.
Este empresario inmobiliario es el cónsul de Rusia en Valencia. A un periodista del Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (ICIJ) le dijo que su relación con Rusia empezó a raíz de viajes a este país por temas de investigación y desarrollo. Le propuso el embajador. Se acababa de jubilar y el consulado honorífico le iba bien como entretenimiento y para fomentar relaciones, añadió. Prefiere no hablar de la guerra de Ucrania.