La huelga en Mercabarna afecta poco a la actividad pese a los piquetes
Los accesos al mercado y a la Ronda Litorial fueron cortados por la mañana
Jornada de ventas y sin incidentes en Mercabarna pese a los piquetes que entorpecieron los accesos al mercado mayorista durante las primeras horas de la mañana de ayer. Los trabajadores de las empresas de frutas y verduras del sector de mayoristas de la provincia de Barcelona estaban llamados a la huelga por CCOO en protesta por las condiciones del próximo convenio colectivo. Las afectaciones concentraron en los accesos entre las seis y las ocho de la mañana. A partir de entonces las protestas se desplazaron al interior, sin entorpecer la compra y venta de productos y a partir de las dos de la tarde se disolvieron.
Desde el mercado mayorista cifraron en menos de un 5% el seguimiento de las protestas, mientras que el sindicato convocante hablaba de una movilización del 90% de los trabajadores. A primera hora de la mañana los trabajadores en huelga -estaban llamados a parar unos 1.600 empleados- cortaron durante cerca de media hora el acceso 18A de la Ronda Litoral en sentido Besós. Mañana hay una nueva convocatoria de paros, que previsiblemente también se concentrarán en Mercabarna.
La afectación sobre el género disponible fue mínimo, según reconocieron tanto empresas como trabajadores. Varias de las primeras hicieron acopio de género durante las jornadas anteriores para evitar posibles problemas con los paros. «El viernes se vendió mucho», dijo el portavoz de la Asociación Gremial de Empresarios Mayoristas de Frutas y Hortalizas (AGEM), Joan Carles Artes. También explicó que parte de las cargas y descargas se han trasladado a hoy, cuando no hay convocada huelga. Las protestas no afectan a las empresas de otros productos alimentarios, como carne o pescado.
Las pugnas por subidas salariales acordes a los actuales niveles de inflación llegan a Mercabarna. El sector de la alimentación ha mantenido su actividad desde el inicio de la pandemia y durante la actual escalada del IPC ha ido aumentando sus precios. Ahí los sindicatos reclaman repercutir también en sueldos esos aumentos de facturación y CCOO exige a la Asociación Gremial de Empresarios Mayoristas de Frutas y Hortalizas (AGEM) que acepte en el nuevo convenio colectivo una cláusula de revisión salarial, para que los salarios suban tanto como acabe subiendo a final de año el IPC.
La huelga de ayer y la convocada para mañana se enmarca en un conflicto entre sindicatos. La UGT, mayoritaria en la provincia de Barcelona, ha llegado a un acuerdo con la patronal del que CCOO no es participe. El pacto contempla un incremento total del 6% correspondiente a los años 2022 y 2023, que entrará en vigor a partir de enero de 2023. Es decir, a tenor de un 3% cada uno de los ejercicios. El nuevo texto también incluye otros elementos como la ampliación del seguro en caso de muerte hasta los 15.000 euros y hasta los 18.000 euros en caso de invalidez permanente.
CCOO considera que un incremento del 3% para este año, dada la inflación actual del 6,8%, es insuficiente y por ello han ido a la huelga.
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Varias empresas hicieron acopio de género para evitar posibles problemas con los paros