Rocha, investigado y expedientado, ya es presidente de la RFEF
El dirigente, a pesar de estar amenazado de suspensión por el Gobierno, asume el cargo casi ocho meses después de la dimisión de Rubiales.
Casi ocho meses después de que Luis Rubiales presentara su dimisión, la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) tiene de nuevo un presidente legítimo y con plenos poderes. Como se preveía desde el momento del cese de su antecesor, Pedro Rocha es desde ayer el nuevo presidente de la Federación. La comisión electoral del organismo hizo oficial su nombramiento, después de que varios recursos fueran retrasando su proclamación. Rocha era el único candidato que había reunido los avales necesarios para aspirar a la presidencia.
De este modo, la asamblea no ha tenido que votar, sino que su designación se ha producido de manera automática una vez cerrado el plazo para la recogida de esos avales y estudiados y rechazados los recursos e impugnaciones al respecto. El dirigente extremeño asume un cargo que puede ocupar durante cerca de medio año como máximo, hasta que se celebren las elecciones propias del ciclo olímpico 2024
28, que elegirán una nueva asamblea, que a su vez designará a un presidente para un mandato completo de cuatro años.
Muchas incertidumbres
Mientras tanto, Rocha tiene la potestad de nombrar una junta directiva y actuar con plenos poderes al frente de la RFEF. La comisión gestora que ha gobernado transitoriamente el organismo durante los últimos meses, cesa definitivamente en sus funciones. Hasta aquí, las certezas.
A partir de ahora, las muchas incertidumbres. Porque Rocha cuenta con dos amenazas inminentes, y otra más a medio plazo, para su permanencia en la presidencia. Está pendiente un recurso de Miguel Galán ante el TAD por la composición del censo electoral, que a juicio de la comisión electoral no debía congelar la proclamación de Rocha. Este recurso, dadas las decisiones previas del propio TAD, tiene pocos visos de prosperar.
Pendiente del Gobierno
La segunda amenaza para Rocha es la reunión que celebrará este martes la comisión directiva del CSD. En ella, el Gobierno tiene la potestad de suspenderle provisionalmente por el expediente que le ha abierto el TAD por haberse extralimitado, presuntamente, en sus funciones como presidente de la gestora.
Pero no se detienen ahí los peligros para el nuevo presidente de la Federación. La tercera amenaza es precisamente ese expediente del TAD, que podría derivar en las próximas semanas en la inhabilitación de Rocha, si el tribunal estimara que en efecto cometió una o varias infracciones muy graves al tomar decisiones para las que no tenía potestad. ■