La catalana De Antonio Yachts servirá un barco eléctrico a la cita deportiva
Modelo de 7,20 metros de eslora
Uno de los valores más buscados por la Copa América de vela es la sostenibilidad. Por eso los organizadores han impulsado medidas de ahorro de agua en las bases de los seis equipos en el Port de Barcelona, colocación de placas solares o uso de embarcaciones de cero emisiones. Durante la competición, que arranca a finales de agosto en Barcelona, los países estarán obligados a usar un barco de acompañamiento de hidrógeno verde como el Chase Zero de America’s Cup Event (ACE). Además, la propulsión eléctrica también estará presente en la cita deportiva y tecnológica.
Llegará de la mano de una empresa catalana, De Antonio Yachts. Instalados en Marina Vela, la firma nació hace 12 años en Barcelona, cuenta uno de sus socios fundadores, Marc de Antonio. «El primer año construimos una unidad, el segundo año tres y este 2024 haremos 175», describe. No obstante, el gran salto ha sido la construcción del E23, su primer barco 100% eléctrico, porque además será el oficial de la Copa América de vela, con lo que el escaparate mundial será enorme.
Gracias a esta proyección por la cita deportiva y tecnológica de este verano en Barcelona, donde se prevé que hasta 1.500 millones de telespectadores sigan las regatas, la compañía aspira a popularizar un modelo que tiene 7,20 metros de eslora. Quieren que se convierta en el primer barco eléctrico de producción en serie, con grandes prestaciones y a un precio muy competitivo (ronda los 125.000 euros), explican.
Para ello, prosigue Marc de Antonio, cuentan con dos astilleros en Polonia y otro en Almería y calculan que podrán hacer 100 unidades al año. Saben que la propulsión eléctrica en el mar no parará de crecer. «Hay países donde se plantean prohibirla navegación de combustión por razones ambientales, así que el sector no dejará de crecer», vaticina.