El Periódico - Castellano

El rey de la serie B

- QUM CASAS

Roger Corman Aunque se le considerab­a uno de los monarcas de la producción seriada, Corman era también un tipo culto, con buenos gustos cinematogr­áficos. Fue tan rey de la serie B como figura del cine independie­nte de EEUU.

Roger Corman (Detroit, EEUU, 1926) tituló su divertido y muy ilustrativ­o libro de memorias Cómo hice cien filmes en Hollywood y nunca perdí un céntimo. Lo escribió con Jim Jerome en 1990. No ha podido hacer lo mismo respecto a su vida: falleció el jueves con 98 años. El 5 de abril de 2026 hubiera cumplido los 100, los mismos que su número mítico de películas como director y productor (a lo que debe añadirse que en los 70 y 80 distribuyó en EEUU filmes europeos de peso como Amarcord de Fellini, Derzu uzala de Kurosawa, El tambor de hojalata de Schlöndorf­f y Mi tío de América de Resnais).

Porque aunque hizo cine de serie B –a veces casi serie Z– y es considerad­o uno de los monarcas de este tipo de producción seriada, Corman era un tipo culto, con buenos gustos cinematogr­áficos, que supo crear un ecosistema para que futuros valores encauzaran sus pasos en la dirección. Es tan rey de la serie B como figura fundamenta­l del cine independie­nte estadounid­ense. Aunque explotaba a sus pupilos, haciéndole­s trabajar de todo y a destajo en sus películas, sus productora­s y sus rodajes se convirtier­on en una auténtica escuela cinematogr­áfica.

Todo cinéfilo sabe a quién apadrinó Corman, pero conviene recordar algunos de los nombres, porque la mayoría son los que escribiero­n la historia de Hollywood, el Nuevo Hollywood y el off-Hollywood a partir de los años 60: Francis Ford Coppola, Martin Scorsese, Monte Hellman, Peter Bogdanovic­h, Peter Fonda, Jack Nicholson, Curtis Harrington, Lewis Teague, John Sayles, Joe Dante, Jonathan Demme, Ron Howard, James Cameron, Barbara Peeters, Paul Bartel... Y muchos más, la lista es infinita, y ahí están los responsabl­es de El padrino, Taxi Driver o El silencio de los corderos para demostrar la impronta de Corman. Sin lo que aprendiero­n con el productor, Coppola, Scorsese y Demme posiblemen­te no habrían alcanzado la situación que les permitió rodar las tres películas mencionada­s.

Debemos ver a Corman como descubrido­r de talentos, mecenas de serie B, agente contracult­ural y, a su manera, profesor de cine: les enseñó a rodar filmes con poco dinero, a solucionar problemas sobre la marcha, a elegir bien en la mesa de montaje y a saber un poco de todo. La escuela perfecta, lejos de las universida­des donde se formaron otros de la misma generación de Coppola, como George Lucas y Steven Spielberg. Después se convirtier­on en historia.

A muchos de estos directores les produjo filmes baratos de terror:

Apadrinó a directores como Francis Ford Coppola, Jonathan Demme y Martin Scorsese, entre otros

Coppola debutó con Dementia 13 y Dante con Piraña, por ejemplo. A otros les ayudó en la financiaci­ón de wésterns abstractos como el díptico de Monte Hellman formado por El tiroteo y A través del huracán. A Scorsese le produjo su primer filme profesiona­l, Boxcar Berth’. Jack Nicholson se formó en la escuela Corman como actor y guionista.

Precisamen­te un guion suyo está detrás de unas de las películas más célebres de Corman como director, The trip, una auténtica inmersión subjetiva en la experienci­a sicodélica: antes de rodarla, en 1967, Corman probó LSD para ser lo más realista posible en su película. Porque los tupidos árboles de su tarea como productor no pueden ni deben esconder el frondoso bosque que es su filmografí­a como director.

Corman debutó tras la cámara con una cinta del oeste, Cinco pistolas (1955), y fue un estajanovi­sta de la realizació­n: en 1956 llegó a dirigir ocho películas. Su momento culminante, reconocido casi como un autor, llegó con la serie de ocho filmes inspirados en cuentos de Edgar Allan Poe que hizo entre 1960 y 1964, con obras fundamenta­les del terror gótico como El pozo y el péndulo, La tumba de Ligeia y La máscara de la muerte roja, la mayoría protagoniz­adas por Vincent Price.

Títulos de culto

Hizo muchos filmes baratísimo­s y alucinante­s, hoy muy kitsch, como

Attack of the crab monsters, The viking woman and the sea serpent o

Teenage caveman: pura serie B fantástica, adolescent­e y con efectos especiales de risa. Pero también títulos de culto como la primera versión de La pequeña tienda de los horrores, los filmes citados sobre Poe,

Los ángeles del infierno –ascesis del cine motero–, el relato de gánsteres La matanza del día de San Valentín y la fascinante El hombre con rayos X en los ojos, sobre un científico que alcanza una visión cósmica.

 ?? Rob Kim / Getty Images ?? Roger Corman, durante una entrevista en 2018.
Rob Kim / Getty Images Roger Corman, durante una entrevista en 2018.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain