El Periódico - Català - Dominical
PADRE E HIJA
existentes en aquel momento, como la tracción animal, no podían satisfacer la demanda. Estudió la cuestión y encontró la energía que tenía futuro. Si mi bisabuelo viviera hoy, apostaría por las renovables».
Tras la rueda de prensa, la cortesía entre la familia Rockefeller y Exxon pasó a la historia. Empezó la confrontación directa.
Si a los Rockefeller no les gusta la empresa, no tienen más que vender sus acciones, se dijo desde Exxon Mobil. Pero para la familia había más en juego que unas simples inversiones. La Fundación Rockefeller financió que la escuela de periodismo de la Universidad de Columbia iniciase una investigación que diera respuesta a una pregunta: ¿qué sabía Exxon sobre el cambio climático?
La opinión pública no supo nada de estos estudios. Al contrario. Durante décadas, Exxon Mobil destinó millones de dólares a financiar a lobbies para que pusieran en duda el cambio climático. MENTIRAS DESCUBIERTAS Gracias a las investigaciones de la Universidad de Columbia, en 2016 Neva Goodwin Rockefeller supo que Lee Raymond supuestamente ya había sido informado de ello por sus propios científicos. Y, sin embargo, lo negó.
«Lo que me pregunto es: ¿por qué Exxon Mobil nos mintió, a nosotros y al conjunto de la opinión pública? –dice Neva Goodwin Rockefeller–. Es una cuestión psicológica: ¿por qué las personas que dirigen grandes Neva Rockefeller –en Moscú en 1964– con su padre, David Rockefeller, durante una visita a Rusia.