La inversión extranjera en deuda pública española sigue a la baja

La inversión extranjera en deuda pública española se ha reducido el 30,9% en los siete primeros meses del año, al situarse en 194.573 millones de euros, frente a los 281.439 millones que alcanzó al cierre del 2011. Es la primera vez desde el año 2008 que la deuda en manos de no residentes se sitúa por debajo del umbral de los 200.000 millones de euros, según los datos del Tesoro.

Los inversores foráneos eran aún en julio el primer colectivo que más deuda soberana española acumulaba, con el 34,09%. Pero cada vez reduce más su peso, ya que al cierre del año pasado suponía el 50,48%.

Las entidades financieras, por su parte, están recorriendo el camino inverso y, desde el cierre del año pasado, prácticamente han duplicado su peso como acreedores, con 184.511 millones en bonos y

La banca duplica su peso como acreedor y acumula una cifra récord

obligaciones a 31 de julio pasado, frente a los 94.378 que tenía a 31 de diciembre, lo que supone un auténtico récord, según las estadísticas del Tesoro. El 32,33% de la deuda pública está en manos de bancos, frente al 16,93% de finales del año pasado. Los expertos coinciden en que las entidades financieras españolas son las que apoyan las emisiones del Tesoro, especialmente las de bonos y obligaciones (vencimientos a medio y largo plazo) y, a su vez, absorben la fuga de los inversores extranjeros.

Los datos del Tesoro también reflejan un tipo de interés medio de la deuda (total de 605.952 millones de euros a 31 de julio pasado) del 4,11%, el mismo que el mes precedente y el más elevado desde el 2008. El acoso a la deuda española ha supuesto desde el 2010 un aumento casi constante cada mes del interés medio (el coste para el Estado).