Cáceres, 23 de abril de 2024
Festividad de San Jorge. Te has levantado algo cansado porque ayer estuviste de fiesta desde las 1 de la tarde hasta la 1 de la noche. De verbena en verbena, de la plaza de San Jorge a la de San Mateo. Luego a la plaza Mayor, a ver los torneos. Y por último a la plaza de Santa María, donde se celebraba el Festival de Cánticas Lúdicas. Eso sí, al menos no dejaste el estómago vacío, y entre trago y trago, picabas algo en las tabernas medievales. Esta tarde irás a la plaza Mayor, a ver el Festival de Música Renacentista, que se celebra después del Gran Baile Medieval. La plaza estará a tope, pero no quieres perderte la actuación de esa orquesta de cámara de la que te han hablado tan bien. Después quizá te acerques a tomar algo a la taberna de Santa María. Igual te encuentras de nuevo con tu amigo Paco. Por cierto, qué cachondo estaba ayer disfrazado de bufón. La verdad es que la ciudad parecía verdaderamente de la época del medievo. Todos caracterizados de bufones, caballeros, damas, soldados, doncellas, frailes, pueblo llano. No te extraña que nuestra fiesta vaya cogiendo tanta fama. No hay muchas ciudades que ofrezcan a los turistas vivir como en el medievo durante varios días.
CÁCERES,
26 de abril de 2024. En El Periódico Extremadura lees la siguiente noticia: ‘Más de 300.000 personas han visitado Cáceres atraídos por la tercera edición de la Semana Medieval. El número de visitantes se ha triplicado desde que se celebró la primera, hace tres años. De hecho, muchos turistas han tenido que pernoctar en hoteles de Trujillo, Mérida y Plasencia. La hostelería, empresarios e instituciones implicadas has mostrado su enorme satisfacción por los resultados económicos obtenidos. Año tras año la Semana Medieval de Cáceres se va consolidando. Son muchos los medios de comunicación, nacionales e internacionales, que difunden nuestra fiesta, resaltándola como única, gracias a la ciudad antigua amurallada en la que se celebra’.
Lo que usted acaba de leer es producto de la imaginación de un servidor, que cree que San Jorge podría convertirse en una fiesta que fuera más allá de un desfile de moros y cristianos y la quema de un dragón en la Plaza Mayor.